Este domingo es un día triste y doloroso para la familia Bosé, que rememora la muerte de Lucía Bosé a los 89 años en un hospital de Segovia en plena pandemia por el coronavirus. La madre de Miguel Bosé, Paola Dominguín y Lucía Dominguín formó una de las sagas más queridas y especiales del país, y la noticia de su fallecimiento generó un estado de conmoción en el mundo del espectáculo y la cultura.

El 23 de marzo de 2020, hace exactamente cinco años, la destacada actriz y modelo perdía la vida. Un triste deceso que se sumaba al de su nieta, Bimba Bosé, en 2017 a causa de un cáncer de mama.

Uno de los lugares más emblemáticos asociados a Bosé era la llamada 'casa azul' ubicada en Brieva, un pequeño municipio de Segovia, a tan solo una hora de Madrid. Esta vivienda, que debe su nombre al característico color azul Klein de su fachada y del pelo de la propia matriarca de la familia, fue el hogar de la actriz durante las dos últimas décadas de su vida.

Tras su fallecimiento, el domicilio fue puesto en venta y, posteriormente, adquirido por unos nuevos propietarios, que decidieron mantener el característico azul del inmueble, que se encontraba hasta en las vigas del techo, y lo transformaron en un alojamiento rural.

Al principio, el precio rondaba los 650 euros por dos noches -una de las reglas para pernoctar en la casa es reservar mínimo dos noches-, y poco después alcanzó los 1.300 euros debido a la demanda.

Ahora que se cumple un lustro sin ella, la web de Informativos Telecinco ha analizado el estado actual de la 'casa azul'. Tal y como se observa, reservar las noches del 22 y 23 de marzo -ambas disponibles- costaban entre 1.300 y 1.720 euros, dependiendo del número de huéspedes.

Asimismo, desde hace semanas, la plataforma no deja reservar del 28 al 30 de marzo, que son escasos días después del quinto aniversario de la muerte de Bosé, por lo que se cree que alguien ya se había animado a hospedarse en la residencia en esta fecha clave.

No son los únicos días en los que el refugio de la Miss Italia 1947 ya está 'bloqueado' en la página de reservas. Del 4 al 6 de abril, del 1 al 4 de mayo y del 27 al 29 de junio ya no está permitido alojarse en la casa.

Con una superficie de 430 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, la 'casa azul' puede albergar hasta 22 personas -antes se podía hasta 28-. Cuenta con una amplia cocina abierta, un salón con chimenea, siete habitaciones, seis baños y una buhardilla, en la que se encuentra una estatua de una vaca azul -símbolo de la excentricidad y el sentido del humor de Bosé-. Además, posee un patio interior y, tras su renovación, una piscina climatizada.

Su transformación -que mantiene gran parte de la esencia y decoración original- en alojamiento rural ha permitido que el legado de Lucía Bosé perdure y que más personas puedan conocer y experimentar el espacio que ella tanto amó. La vivienda no solo ofrece una estancia cómoda y única, sino que también permite a los huéspedes conectar con la historia y el arte que impregnaban la vida de Bosé.

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