La semana pasada, Nicols Nicolasa Bronstowich, exmujer de José Manuel Díaz- Patón, relató en 'Fiesta' el infierno que había pasado por culpa del abogado. Contó que, en su relación con el exnovio de Ágatha Ruiz de la Prada, se sentía una esclava, que no tenía ni voz ni voto y que la verdadera cara del abogado nada tiene que ver con la que muestra a los medios de comunicación. Ahora, visita el plató del programa para dar más detalles de lo que ha vivido junto a él y para responder a sus acusaciones.
Nicoles nos cuenta que ella y Patón se conocieron en el año 2002 a raíz de ser presentados por una tercera persona y, desde el principio, notó que era "un gran seductor": "Me enamoré y, después de unos seis meses, comenzamos a vivir juntos". Pero ¿cuándo comenzó el infierno al que se refiere? "Él cambia a los dos o tres años, rotundamente, cuando él consigue lo que quiere de mí, que son mis hijos. Él quería eso de mí porque él no podía tener hijos", confiesa, aunque no quiere dar más detalles de este proceso.
Cuando ella está embarazada, es cuando percibe un cambio en él "en todo": "La convivencia con él es complicada. No es lo que presenta en su cara". "Cuando yo preguntaba cómo iba a ser nuestra familia, él no me contestaba nunca tenía tiempo", añade. Ante todas estas acusaciones, Patón ya se ha defendido desde el programa 'Tardear' y ella responde al hecho de que él diga que ella está de okupa en su casa.
"Él me anuló. No tenía ni voz, ni derecho a hablar u opinar. Venía un día por la tarde y estaba cansadísima porque mis hijos son gemelos y es muy duro criar a dos bebés a la vez sin ayuda. Llegaba a casa y decía 'estás aquí sentada, vamos a salir'. Habla siempre muy vulgar, gritando. Lo que él muestra es todo falso, es un montaje toda su vida. Él me ha robado veinte años de mi vida. No trabajaba porque me dijo que no me hacía falta", nos cuenta.
Nicols dice que no se cree que Díaz-Patón haya estado enamorado de la diseñadora porque "él nunca se enamora" y cree que está con ella solamente por el hecho de que es famosa. "Quiero que me deje en paz, no me deja vivir. Llevamos nueve años de juicios. No voy a entrar en sus mentiras. Tenemos tres juicios en proceso y dice que lo ha ganado todo. No tengo tiempo para esto ni me interesa su vida. Ojalá sea feliz y me deje en paz. No me suelta porque quiere controlarme, él siempre controla a todo el mundo".