Laura Galera era una de las benjaminas de la última edición de anónimos de 'Gran Hermano', pues cumplió los 21 años dentro de la casa de Guadalix de la Sierra. Pero, pese a su juventud, la hija de María José Galera reivindicaba su capacidad para haberse labrado un futuro desde muy joven y es que, con tan solo 17 años, consiguió el título de auxiliar de clínica y, de hecho, recientemente estuvo presente en quirófano cuando su hermana mayor, Patricia Ruiz, se sometió a una operación de pecho.

Pero ser auxiliar de clínica no era su objetivo final antes de entrar a 'Gran Hermano', pues en ese momento se encontraba estudiando las oposiciones a Policía Nacional, sueño que compartía con su compañera Violeta Crespo. Y compaginaba el estudio con su trabajo como camarera. De hecho, tuvo que pedir un permiso laboral para poder participar en el reality en el que su madre se hizo conocida 25 años antes: la propia María José contó que su hija había tomado esta decisión incluso antes de saber si entraría a la casa porque su esperanza era tener la oportunidad de cumplir ese sueño.

Pero, tras su aventura en la televisión, la novia de Manu 'Vulcán' le ha confesado a sus más de 57.000 seguidores de Instagram - en TikTok tiene más de 21.000 ya - que le gustaría ser creadora de contenido en las redes sociales a tiempo completo: "Siempre me ha encantado y he valorado mucho a las personas que lo han conseguido, espero llegar tan lejos como alguno de ellos".

Hay exconcursantes de 'Gran Hermano', como comenta la sevillana, que han conseguido llevar a lo más alto en el sector de las redes sociales, siendo uno de los casos más populares el de Sofía Suescun, que entró a la casa de Guadalix de la Sierra en 2015 con 18 años, siendo una estudiante de Psicología que llegaba de Pamplona de la mano de su madre, Maite Galdeano, y que actualmente cuenta con un millón y medio de seguidores en Instagram, siendo así una de las influencers más exitosas de nuestro país.