El pasado 14 de enero, Kate Middleton anunció que su cáncer estaba en remisión, una buena noticia que colmó de felicidad a los seguidores de la Corona británica después de que la princesa se haya enfrentado al año más complicado de su vida por la enfermedad.

Tal y como anunció el Palacio de Kensington, está previsto que este 2025 regrese poco a poco a sus funciones, aunque lo hará de forma gradual, sin que entorpezca su estado de salud ni su vida familiar, que se han convertido en sus dos prioridades.

Parece que la esposa del príncipe Guillermo quiere recuperar la normalidad que habitaba en su día a día antes del cáncer y aprovechar al máximo los momentos en los que se encuentra mejor para disfrutar de su familia y hacer planes más allá de sus compromisos con Buckingham.

Ahora, se ha conocido el último plan secreto y familiar de la nuera del rey Carlos III con el que queda reflejado que se encuentra con más fuerzas.

Tal y como ha desvelado 'Daily Mail', Kate se desplazó a los Alpes junto al príncipe Guillermo, sus hijos George, Charlotte y Louis y con su hermano James para disfrutar de unas tranquilas vacaciones después de Año Nuevo.

Los príncipes y sus hijos fueron vistos en un restaurante de la zona junto a una estación de esquí tomando bebidas calientes y comiendo mientras se mostraba "feliz y relajada", han asegurado desde el tabloide británico. Los nietos del soberano británico llevaban ropa de esquí, lo que significa que aprovecharon la visita para practicar este deporte.

Un miembro del personal ha desvelado al medio que "fue encantador ver a Kate relajándose y disfrutando" mientras pasaba desapercibido. "Parecía una familia inglesa normal y mucha gente no los reconocía. No era la primera vez que los veíamos. Llevan años viniendo aquí. Creo que les encanta la zona. A menudo vemos también a Pippa, la hermana de Kate".

Kate también estuvo junto a su hermano James y su esposa. "Era una especie de fiesta familiar de los Middleton. Todos parecían muy felices", ha declarado un camarero del local, añadiendo que "no había aires de grandeza y, en realidad, parecían una familia normal disfrutando de unas vacaciones de esquí. Hubo muchas risas y los niños fueron muy educados".

Asimismo, la fuente ha subrayado al 'Daily Mail' que "la única razón" por la que se hubiera sabido que eran "personas importantes" es que Kate llegó junto a varios agentes de seguridad.

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