Violeta Crespo ha sufrido un robo en pleno centro de Madrid. La exconcursante y finalista de la última edición de 'Gran Hermano' se encontraba con Edi cuando el delito se ha producido. Triste, ha comunicado lo sucedido a sus seguidores a través de las redes sociales de su novio.

Apenas unas horas después de anunciar la oficialización de su relación con Eduardo Insua - verdadero nombre de su novio -, la joven de Tembleque ha sido víctima de un hurto.

Aprovechando su paso por la capital y que el periodo de rebajas ya ha comenzado, la pareja decidió darse un paseo por la Gran Vía y visitar algunas tiendas. Precisamente, y beneficiándose de la multitud y la cantidad de gente que va de compras en este periodo o que necesita hacer algún cambio o devolución, son muchos los malhechores que escogen estas fechas para cometer sus fechorías. Los hechos se produjeron en un famoso comercio al que entraron y en el que él empezó a probarse ropa.

Tal y como ella misma ha comentado, la sustracción de su teléfono móvil se habría producido mientras su novio estaba en los probadores. Aunque no ha dado demasiados detalles de lo ocurrido, todo apunta a que el 'robo' habría tenido lugar sin violencia e intimidación.

Este tipo de robos se consideran hurtos, ya que los bienes ajenos han sido tomados sin el empleo de la fuerza o el miedo. Sin especificar si ha notificado ya los hechos y denunciado ante las autoridades, la opositora a Policía Nacional ha querido utilizar las redes sociales de su novio para contar lo sucedido y, de paso, disculparse por lo ausente que estará hasta que pueda hacerse con un nuevo teléfono. "Estaba con Edi, que se estaba probando ropa y me han robado el móvil. Si no subo cosas es por eso", ha contado.

Desde un conocido restaurante italiano situado en la considerada como 'La milla de oro de Madrid', Violeta Crespo ha asegurado sentirse "muy triste" por lo sucedido. Aun así, tras hacer oficial su relación con el gallego y después de haber vivido con él unos días muy especiales, a la amiga de Nerea ni siquiera esto consigue borrarle la sonrisa del rostro. Mucho menos quitarle el hambre. Así pues, tras contar lo sucedido y justificar su ausencia hasta nuevo aviso, ha dicho 'adiós' y se ha dispuesto disfrutar de su cita con su nuevo novio y excompañero de concurso.