Maica Benedicto ha sido una de las grandes protagonistas de la edición de 'Gran Hermano' que acaba de terminar en Telecinco y en la que Juan Quintana se ha proclamado ganador tras un reñido duelo contra Óscar Landa en la final. A la murciana le ha alegrado mucho la victoria del bailarín y no le apena no haber ganado este concurso porque ahora tiene una nueva oportunidad para llegar a la final de un concurso ya que formará parte de la tercera edición de 'GH DÚO'.
En menos de dos semanas volverá a residir en la casa más famosa de la televisión y estará acompañada por Marieta, Ana Herminia Illas, José María Almoguera, Aurah Ruiz, Jeimy Báez y sus compañeros de esta última edición de anónimos, Javier Mouzo y Vanessa Bouza. El jueves 2 de enero vuelve la vida en directo a Telecinco y la murciana ya está preparada para esta experiencia, en la que promete que volverá a usar mucho la lejía y que las risas serán su sello distintivo.
Hasta entonces, disfrutará de su familia y amigos, a los que ha estado varios meses sin ver por su paso por 'Gran Hermano'. Este pasado fin de semana regresó a su tierra, Cartagena, y allí su familia le esperaba con una fiesta sorpresa de la que la modelo ha querido presumir en sus stories de Instagram, donde ya supera los 90.000 seguidores.
En las fotos que ha compartido se puede ver que usaron globos con las letras de 'GH', que prepararon comida típica de la gastronomía murciana como las marineras y que no faltaron los pastelitos. "Amores, ayer mi familia me tenía preparada una fiesta sorpresa de bienvenida. Verlos a todos y la comida murciana me cargó las pilas", comentó Maica junto a esas instantáneas, en las que solo posa con su perro y su hermano, Antonio.
El joven es el único miembro de su familia al que Maica muestra en redes y el único que ha ido a defenderla a los platós de televisión. Parece que el resto de sus familiares, aunque la apoyan en su aventura televisiva, prefieren mantenerse en el anonimato.