Álvaro Muñoz Escassi y Sheila Casas han protagonizado varias secuencias en las que queda claro que, aunque ellos dicen ser solo amigos, son mucho más. Comparten pasión, diversión y toda esa complicidad se ha visto reflejada en el plató de 'TardeAR', que celebra la Nochebuena con un especial musical. Por ello, el jinete ha decidido hacerle una propuesta...
Los colaboradores han interpretado 'Corazón partío', un tema de Alejandro Sanz y es que, sin duda, el cantante ha sido protagonista de la actualidad en este año 2024 por su ruptura y su nueva relación.
Los colaboradores se han convertido en un dúo climático que subía la temperatura pero en el que, a pesar del riguroso playback, no podían evitar desafinar. Sin embargo, las voces pasaban a un segundo plano por lo sugerente de su coreografía, plagada de caricias, mucho taconeo, vueltas, giros y alguna que otra maniobra arriesgada.
Una actuación explosiva que nos ha regalado un momentazo lleno de complicidad y rematado con una acrobacia que nadie esperaba y que ha acabado con beso en el cuello, lo que muchos de sus compañeros interpretaban como una 'cobra'.
Tras desengancharse por culpa de sus lentejuelas, ambos se enfrentaban al veredicto del jurado. "Juegan con ventaja, aquí hay mucho contacto, mucha química", decía Ana Rosa Quintana y Alaska, del comité de divas encargado de valorar las actuaciones, decía: "Son guapos, bailan bien... algo tenía que no estar en el camino en estas dos personas y quizá sea cantar".
Misma visión compartía Lolita, que se había llevado una decepción: "Tú, que siempre me has gustado y te he visto un morbo especial, se me ha quitado el morbo, no te he visto sexy, un baile que me has hecho con las piernas así abiertas…" Eso sí, tenía algo que decir a Sheila: "Te digo, habla con tus hermanos y dedícate a ser actriz ¡Que te metan en una película, pero sin cantar!"
"Han estado más pegados que un chicle de merengue en los ensayos", anunciaba Ana Rosa Quintana y estaba en lo cierto. En las imágenes podíamos ver que llegaban a lo Olivia Newton Jhon y John Travolta, con él gateando literalmente detrás.
Sin embargo, su química no hacía que sus voces mejoraran ni practicando escalas ni respiraciones. Además, se lo ponían un poco difícil a la coreógrafa, que nos decía: "Venga dejad de toquetearos".
"Te había prometido que cuando Sheila y yo fuéramos novios...", decía Álvaro unos minutos después a Ana Rosa y ella le daba paso. El colaborador, arrodillado, le pedía a Sheila: "¿Quieres ser mi novia?"; "Bueno, ¡Sí!", respondía ella mientras le daba un beso en la mejilla y le susurraba algo al oído.
"¿Esto qué significa?", preguntaba la presentadora y ellos se quedaban en el presente: "Las cosas hay que hacerlas cuando te apetecen y cuando se terminan, se terminaron".