Anna Ferrer Padilla ha vivido lo que es el caos de una reforma en casa y ahora también las consecuencias de no haber tomado decisiones acertadas. La hija de Paz Padilla se ha sincerado con sus seguidores y ha compartido un vídeo en sus redes donde se pueden ver los cuatro errores que ha cometido en la reforma y con el que demuestra que no todo es de color de rosa en la vida de un influencer.
Anna Ferrer está pagando en la actualidad por cuatro errores que no volvería a repetir "por nada del mundo" y que le han generado malestar con el que era un proyecto ilusionante como era el de su casa. La influencer ha contado y mostrado abiertamente todo lo que ella inicialmente pensó que eran buenas ideas, pero después se ha dado cuenta de que no lo eran cuando ha comenzado a vivir en su piso como propietaria.
A modo de consejos y con el objetivo de que sea algo "útil" y para que no repitan los mismos errores, la hija de Paz Padilla ha ido enumerando una por una las equivocaciones en las que ha caído y que ahora le hacen el día a adía más difícil en su casa.
En esta ocasión el 'house tour' que ha hecho la hija de Paz Padilla ha estado muy alejado de la imagen idílica de las habitaciones o rincones de una casa perfecta. La creadora de contenido se ha mostrado más natural que nunca cuando ha comenzado presentando el primer error que no repetiría: este es el de mudarse antes de que terminasen la misma reforma.
Por esta decisión la influencer tuvo que vivir al principio una serie de situaciones incómodas que ha detallado sin ningún tipo de reparo. "Fue por las circunstancias, nos mudamos cuando todavía no había terminado la reforma porque no cumplieron con los plazos y yo me tenía que ir del piso en el que estaba. El día que yo llego con la mudanza había ocho personas y nos vimos aquí solo con un baño, no había lavabo, no había fregadero porque se había roto la encimera. Nos lavábamos los dientes en la ducha", ha explicado.
Esto no ha sido lo único con lo que se ha hecho cruces después la hija de Paz Padilla. Lo que ella considera "el mayor error de todos" es el vestidor que ella misma diseñó y la distribución de armarios que ahora ha enseñado. Algo que no ha dudado en enseñar:
"Me dijeron que era muy difícil elegir bien la estructura interna del armario y está todo mal", ha contado. Las cosas no están tal y como ella había pensado y no es práctico, tal y como está todo organizado. "No tiene sentido tener los abrigos al fondo de la habitación. Mis vestidos largos hechos un 'gurruño' porque no tengo espacio para que cuelguen. No me caben bien las camisetas y lo mismo me pasa con los bolsos que están unos encima de otros y para mí era algo importante", son sus principales quejas. Su resumen es contundente: "Mi vestidor lo tiraría abajo y lo volvería hacer de nuevo".
En cuanto al tercer error tiene que ver con el baño y sus paredes. La hija de Paz Padilla descartó la pared de baldosas por una pared pintada como en el resto de la casa y su decisión le ha salido cara al ser un baño no muy grande. "Es muy complicada de limpiar. Te vas rozando y al final se ensucia mucho".
El último consejo que ha dado Anna Ferrer Padilla a partir de sus errores en la reforma hace referencia a los puntos de luz y, en concreto, a los enchufes y a los interruptores de la casa. Por más vueltas que le dio a este tema, la influencer ha asegurado que ahora no están bien situados a nivel práctico y, en el caso de los enchufes, le faltan y están teniendo que tirar de regletas.