Después de varias semanas conociendo candidatos a ocupar su corazón en 'Un amor para Lucía', un dating show hecho a la medida para que Lucía Sánchez encuentre el amor, la exparticipante de 'La isla de las tentaciones' ya tiene nuevo novio. Se trata de Manu Gaona, un joven con el Lucía ya tuvo un romance hace varios meses. Lo conocemos en profundidad.
La nueva pero conocida ilusión de la ex de Isaac Torres es gaditano como ella, por lo que ya parten con buen pie ya que la distancia no le gusta mucho a la ganadora de 'GH DÚO' a la hora de entablar relaciones sentimentales. De él también sabemos que es dos años mayor que Lucía, tiene 32 años. Otro punto a favor para que la simpática andaluza haya apostado por él.
Según ha revelado la propia Lucía, se conocieron hace varios meses a través de las redes sociales y le "encantó". Además, no es un ‘buscafocos’ profesional ya que según le comentó en su primera cita en el programa no es una persona que disfrute de la atención mediática. “Me da tranquilidad y estabilidad”, dice Lucía sobre el chico al que ha entregado la lleve de su corazón.
¿Y por qué su historia no llegó a buen puerto en su momento? Lucía comenta que fueron sus propias inseguridades (o más bien la falta de ellas) las que lo dejaron escapar: “No sentía la necesidad de controlarlo”, dice. “No me explicaba cómo era tan normal”, aseguró en la final del programa. Por suerte, la vida le ha ofrecido una segunda oportunidad a Lucía y ahora inicia un proyecto de futuro junto a él: “Yo le aporto la tranquilidad que necesita y ella a mí ese toque alocado”, asegura por su parte Manu.
El nuevo novio de Lucía Sánchez es claramente un joven muy atractivo: de pelo moreno y con barba, es varios centímetros más alto que la estrella de la telerrealidad. A la hora de vestir es de corte más o menos clásico, aunque no por ello es rancio o desfasado: camisas y camisetas básicas, vaqueros y deportivas forman parte del outfit habitual del joven. La elegancia de la serenidad de su carácter se refleja en su manera de vestir.
Gracias a su perfil de Instagram sabemos que se trata de un hombre deportista que practica crossfit y es aficionado a los tatuajes: a pesar de que tiene el pecho y los brazos impolutos (solo luce un minúsculo dibujo de un rayo en su cuello) ha reservado su espalda para rellenarla de dibujos de tinta.
También sabemos que tiene inquietudes y se muere de ganas por visitar Japón y disfrutar de su milenaria cultura y éste puede que sea su primer destino como pareja. A pesar de que es muy discreto en lo que ha publicaciones se refiere -no hay más que una docena de fotos- también podemos intuir que el nuevo novio de Lucía Sánchez es sereno y reflexivo.