Los días previos a la Navidad, muchas familias se reúnen para disfrutar de una de las sagas más mágicas de la historia del cine: la de Harry Potter. Las películas basadas en la obra de J.K.Rowling son un clásico que ha traspasado de generación a generación y sus actores protagonistas forman parte del imaginario de millones de niños (y adultos también). Uno de ellos, el británico Rupert Grint, no está pasando, sin embargo, por uno de sus mejores momentos; no sólo por el dolor que le causó la muerte de su amiga y compañera Maggie Smith, sino, también, por sus problemas con Hacienda.
Según la agencia de comunicación Associated Press, el actor debe 1,8 millones de libras (2,17 millones de euros) a la Agencia Tributaria Británica -His Majesty’s Revenue and Customs (HMRC)- por los remanentes que ha recibido de las exitosa películas rodadas por Warner Bros. Inicialmente, se le obligó a pagar esta cifra en 2019, después de que el HMRC iniciase una investigación sobre sus declaraciones de impuestos del año fiscal 2011-12, al darse cuenta de que se había una irregularidad en torno a sus ahorros residuales.
Éstos provienen de los beneficios a largo plazo de un trabajo que se realizó en el pasado y al que ya no se está dedicando el mismo tiempo ni esfuerzo, pero que sigue rentando. Es un tipo de ingreso muy común en los cantantes y actores, cuyas series o películas se reproducen una y otra vez a lo largo de los años.
La HMRC se dio cuenta de que los residuales de Rupert Grint, la mayoría de ellos provenientes de la venta de los derechos de las películas a los canales de televisión, streaming o en formato DVD, se habían calificado erróneamente como 'activo de capital', en vez de como 'ingresos'. Para subsanar este error, se le solicitó que adjuntara la cantidad de dinero que faltaba, en base al impuesto correcto.
Los abogados del actor recurrieron esta solicitud pero, ahora, la jueza Harriet Morgan se ha pronunciado finalmente de parte de la HMRC, determinando que los residuales de la estrella son ingresos y no un mero activo de capital, por lo que está obligado a pagar los citados 2,17 millones de euros. La sentencia ratifica, por tanto, que el dinero derivaba “sustancialmente” de la totalidad del valor de las actividades del actor británico. Anteriormente, el intérprete de Ron Weasley perdió otro caso judicial, también en 2019, por el que tuvo que reembolsar un millón de libras en impuestos.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.