El casting de 'GH 19' nos tiene living desde el primer día de convivencia. Este año la casa de Guadalix está repleta de personas multifacéticas y únicas. Hoy hablamos de Adrián Thiam Creus que antes de su ingreso en la casa era un campeón de boxeo de relevancia internacional… ¡Nos adentramos en su vida personal y profesional!

De padre senegalés y madre española, Adrián solo tiene 26 años pero ya cuenta una vida de éxitos deportivos. Criado en el barrio de Sant Pedro y San Pablo de Tarragona ha sido campeón de España de boxeo amateur 5 veces y también ha noqueado en los rings fuera de nuestras fronteras: obtuvo la medalla de bronce en el campeonato de Europa en 2022.

Su proyección deportiva le ha permitido obtener una beca de la Asociación de Deportes Olímpicos y antes de ingresar en 'GH' vivía en la prestigiosa Residencia Joaquín Blume para los deportistas de alto nivel. El año pasado fue un año complicado en su trayectoria deportiva: las lesiones le impidieron llegar a los Juegos Olímpicos y fue cuando valoró que la magia de 'GH' cambiase su vida. "Me vine abajo", admitió a la prensa tarraconense.

Antes de convivir en la casa más famosa de España el boxeador ya había recuperado la ilusión. "Que se preparen. No estaré en París, pero quiero llegar a Las Vegas", advertía cuando no sabía que sería participante del programa de sus sueños.

Más allá de su palmarés deportivo, el Instagram de Adrián nos chiva algunos detalles sobre su vida anterior a 'GH'. Adrián es un joven con muchísimo rollazo y le encanta vestir con ropa de estilo urbano. Invitado habitual de eventos de ámbito deportivo, cuando no le toca competir sorprende con atuendos cargados de personalidad.

Los coches son otro de las grandes pasiones de Adrián: al joven le encanta posar junto con vehículos de alta gama afianzando así su inconfundible sello personal.

Adrián llegaba a los platós de Mediaset el pasado 5 de septiembre sin saber si era uno de los seleccionados. Jorge Javier anunció su nombre por sorpresa al tiempo que un doble de Ion Aramendi desplegaba una lona gigante con su cara. "Lo estoy asimilando un poco pero psicológicamente estoy preparado. Me siento muy afortunado de poder estar aquí. Quiero que la gente vea cómo soy", se atrevió a decir. También reconoció que es muy cabezón e impaciente pero que cuando quiere, y aunque es muy ambicioso y luchador, no pierde de vista su faceta de persona amable, respetuosa y, sobre todo, cariñosa.