Naomi Asensi muestra el detalle que se llevó de 'GH VIP' para decorar su habitación
La ganadora de la octava edición de 'GH VIP' ha abierto las puertas de la habitación de su nuevo piso en Madrid
Naomi Asensi ha enseñado el detalle que se llevó de la gala final para recordar siempre esta experiencia
La exparticipante de 'La isla de las tentaciones' ha puesto este detalle en la estantería de su cuarto
Naomi Asensi ha reactivado su canal de mtmad, 'Vienen curvas', tras su paso por la octava edición de 'GH VIP', de la que se proclamó ganadora frente a Luitingo. Así, en uno de sus nuevos vídeos ha mostrado cómo es el piso de Madrid que ha alquilado y al que ya se ha mudado para empezar una nueva etapa vital, en la que seguirá teniendo muy presente su estancia en la casa de Guadalix de la Sierra porque se llevó un detalle muy especial de la final para decorar su habitación.
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El cuarto es completamente nuevo, con paredes blancos y suelo de parqué. Ha sido la exparticipante de 'La isla de las tentaciones' la que ha tenido que amueblar todo la estancia - así como todo el piso - porque la vivienda es de nueva construcción y ha optado por una decoración sencilla, muy fiel al estilo por el que se decantó a la hora de decorar el piso que compartió en Valencia con su exnovio Adrián Blanch.
Pero entre todos los elementos decorativos que ha escogido en distintas tiendas de muebles y decoración por las que se ha paseado estos días en compañía de su perrito Stitch, destaca un elemento que la influencer se llevó de la final de la octava edición de 'GH VIP': se trata del sobre dorado con el logo azul del programa en el que estaba el papel en el que figuraba su nombre como ganadora.
Ese sobre que Marta Flich abrió el jueves 21 de diciembre y que la convirtió en la vencedora de la edición (tomando así el revelo de Adara Molinero) es muy especial para ella por lo que simboliza y, por ello, quiso llevárselo a su nuevo hogar, para recordar para siempre esta experiencia única que sin lugar a dudas se ha convertido en una de las mejores de su vida y en un punto de inflexión.
En una de sus últimas visitas al confesionario ella misma contó que un mes de antes de entrar en la casa de Guadalix no era capaz de salir de la cama y se pasaba el día llorando por la ruptura con Adrián Blanch, pero que gracias a su paso por el concurso había conseguido volver a sonreír y recobrar la ilusión por sus proyectos personales y profesionales.
