Para aquellos que pensaban que los beneficios del éxito de María Isabel habían terminado hace 20 años, cuando triunfó con el ‘Antes muerta que sencilla’, se equivocaban. La cantante y concursante de 'Bailando con las estrellas' vive en una impresionante vivienda de tres plantas en la que no falta un solo detalle. La artista y su pareja, Jesús Marchena, se mudaron a este chalet en 2022 unos meses antes de convertirse en padre y ejecutaron una importante reforma al inmueble para dejarlo a su gusto, objetivo que han cumplido con creces.

Una de las primeras decisiones que tomaron fue la de pintar las paredes de color blanco. Según explica la propia María Isabel, cuando compraron la vivienda cada habitación tenía un color diferente y eran "bastante llamativos", algo que no comulgaba con las intenciones estéticas de la joven pareja.

La habitación de matrimonio cuenta con un baño en suite. A juego con el resto de la casa, el aseo principal también tiene las paredes blancas y el resto en tonos negros. El dormitorio, por su parte, cuenta con "una luz diferente" a la del resto de la vivienda porque tanto ella como Jesús querían que fuese "una zona más íntima". El dormitorio está decorado con tonalidades tierra que aportan un plus indiscutible. "Es muy boho chic, como se dice ahora", resume la otrora ídola infantil.

Presumida por naturaleza, el vestidor es una de las zonas clave de la vivienda de la artista. Se trata de una habitación a la que ha trasladado los muebles que tenía en su antiguo piso para poner todas sus prendas y complementos. No falta de nada y está llena de bolsos y complementos de marca. "Lo he adaptado de tal forma que me ha quedado un vestidor grande", comenta con orgullo. En este espacio conviven las prendas de la cantante con la de su pareja que, por la cantidad de accesorios que atesora, también parece muy interesado en el mundo de la moda.

La pareja disfruta mucho de las opciones de relax que les ofrece el salón comedor de la vivienda. Aquí es donde ambos pasan la mayor parte del tiempo. La mesa principal es de cristal sobre una socorrida alfombra de yute. Para las sillas María Isabel y su chico han optado por unos asientos de estilo nórdico de color blanco.

Por su parte, la zona de ‘living’ cuenta con una hermosa chimenea sofá en forma de cheslong en tonos naturales como el resto de la casa. “Es muy sencillo, pero super bonito”, indica la cantante que ha cedido las labores de decoración a su pareja: "La decoración la ha hecho Jesús, le encanta y tiene mucho estilo a la hora de combinar. Las ideas principales las ha puesto él y me fío de él en todo”. Toda la estancia está decorada con plantas artificiales que le aportan una nota vegetal y colorida.

"Para mí mi casa es mi templo. Tiene 3 plantas y la segunda es la principal, donde hacemos vida”, cuenta María Isabel. Allí se encuentra la cocina que fue uno de las habitaciones que más tardaron en reformar. En este esta planta la pareja cuenta con un baño de invitados que es "muy sencillo, pero a la vez muy bonito".

En la tercera planta, que también cuenta con otro aseo, María Isabel ha dispuesto un rincón de belleza. La cantante, que además de haber estudiado Educación Infantil también tiene formación estética, ha organizado un completo gabinete de cuidado personal en el que cuenta con todo tipo de cosméticos y hasta una camilla para tratamientos corporales.

El gimnasio privado de la artista se encuentra en la primera planta del inmueble. Allí cuenta con distintas máquinas para ejercitar los músculos y hacer ejercicios de cardio. En esta zona María Isabel y Jesús también han puesto una mesa de ping pong donde sus amigos organizan emocionantes torneos cada vez que los visitan.