La primera conquista europea de España se remonta a 1964, en los días de la dictadura franquista. Se enfrentaron en la final dos selecciones en la que se convirtió en la mayor gesta deportiva para la propaganda nacional al vencer por 2-1 al bloque comunista de la Unión Soviética, con goles de Pereda y Marcelino. Otros ilustres como Amancio y Luis Suárez jugaban bajo las órdenes del seleccionador José Villalonga.
En 1984, una falta y un error maldito de Arconada en la final de la hizo que los franceses nos venciesen y nos apartó de nuestra segundo campeonato europeo. No mucho tiempo después Palop se encargaría de vengar la memoria del mítico portero español. Los de Platini se hicieron con la gloria a nuestra costa, una vez más.
Tuvieron que pasar 44 años para que España volviese a conseguir cantar victoria en España. Con un combinado que consiguió dejar a un lado sus egos y polémicas, así como sus maldiciones de cuartos, España empezó a creer al derrotar a Italia por penaltis.
Un combinado del que es muy difícil destacar a un sólo jugador: Iker Casillas y Xavi Hernández capitaneaban una generación de excelentes jugadores como Fábregas, Silva, Iniesta, el goleador David Villa o incluso el brasileño nacionalizado Marcos Senna.
Todos seguían la batuta de Luis Aragonés, que fue el primero en atreverse a poner a bailar a los 'bajitos'. Tuvo que ser Fernando Torres el que permitiese entrar en la historia a España con un desmarque de película que dejó atrás a Lahm y batiendo a Lehmann en su salida, para que el balón entrase llorando por la cepa del poste.
La Eurocopa 2012 se ha confirmado como la cúspide del éxito español, conquistando la 'Triple Corona' consecutiva y su tercera Eurocopa. El proyecto no se ha visto desgastado a pesar del tiempo y de las lesiones de David Villa y Puyol, y a pesar de no haber emocionado excesivamente a la afición en los primeros partidos de grupo. España sólo ha encajado un gol en la competición ha mostrado su mejor versión en los momentos realmente importantes: en la prórroga en la semifinal ante Portugal y en la final ante Italia.
El proyecto de Del Bosque ha salido adelante a pesar de las dudas y con un novedoso sistema sin delantero centro puro, basado en tres hombres ofensivos de gran toque y movilidad con la intención de dominar la posesión y buscar la portería rival a base de paredes. Durante el torneo jugadores como Ramos o Fábregas se han acoplado perfectamente a sus nuevas tareas, y ha destacado la novedad de Jordi Alba, que firmó un gol en la final ante los 'azurri', después que Silva se encargó de adelantar a España al rematar un centro de 'Cesc'. Torres y Mata completaron la goleada.
ALEMANIA YA NO DOMINA SOLA
Alemania por su parte, consiguió su primera Eurocopa en 1972 con sede en Bélgica, con jugadores tan legendarios como Gerd Müller (marcó 5 goles) o Beckenbauer, venciendo por 0-3 a la Unión Soviética. Los soviéticos comparten con los alemanes otro récord mucho más amargo, el de las finales perdidas, con tres torneos que se les escaparon de las manos. La segunda llegó en Italia en 1980 con una quinta de grandes nombres como Müller, Rummenige o Schuster. La selección bávara venció a la mejor generación que ha dado el fútbol belga por 2-1.
La última gesta europea de los alemanes se remonta a 1996 tras vencer por penaltis a los anfitriones ingleses, con una selección que rozó su único europeo formada por grandes jugadores ofensivos como Cascoigne, Sheringham o Alan Shearer. En la final, la generación de Köpke, Bierhoff, Ziege y Klinsmann venció a la poderosa selección checa por 2-1, que contaba entre sus filas con jugadores de la talla de Kouba, Nedvêd, Bejbl o Poborsky.