Daniel Sancho ha conocido su sentencia después de un año en prisión preventiva. El hijo de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo ha sido condenado a cadena perpetua por el asesinato de Edwin Arrieta, librándose con ello de la pena de muerte que solicitaba la Fiscalía de Tailandia. En un programa especial sobre el caso, la hermana de Edwin, Darling Arrieta, ha intervenido en exclusiva para revelar cómo lo ha vivido la familia del cirujano colombiano.

Daniel Sancho habría roto a llorar al conocer la sentencia, El chef de 30 años ha sido condenado por asesinato con premeditación, ocultación de cadáver y destrucción de documentación ajena. Además, Daniel Sancho deberá indemnizar a la familia de Edwin Arrieta con 4 millones de bat (106.000 euros). Aún con todo, el joven habría visto reducida su condena librándose de la pena de muerte por su colaboración en el proceso judicial, según ha indicado el juez en la Corte del Tribunal Provincial de Koh Samui.

En exclusiva para Telecinco y en directo desde Lorica (Colombia), la hermana de Edwin Arrieta, Darling Arrieta, se ha mostrado satisfecha con la condena de Daniel Sancho. "Gracias a Dios, hubo justicia. Es lo que esperábamos. Fue la cadena perpetua y así el Señor nos lo ha concedido", manifestaba, asegurando que su familia ahora va a poder encontrar "algo de tranquilidad entre el dolor".

Darling Arrieta también ha revelado en 'La sentencia de Daniel Sancho', con Verónica Dulanto y Manuel Marlaska, cómo recibió la resolución del caso. "De las ocho y media a las once y media dormí, y entonces empezó a sonar mi celular. Era Adriana Behainees y me dijo 'Darling, se hizo justicia, la muerte de Edwin no quedó impune", ha explicado.

"Tuve sentimientos encontrados. Lo primero que hice fue darle las gracias a Dios porque no nos dejó en vergüenza y ni nos abandonó. Lloré porque la muerte de mi hermano no quedó impune; porque mis papás van a tener un poquito de tranquilidad en medio de tanto dolor; y porque mi hermano ya puede descansar en paz", añadía Darling Arrieta sin poder contener, en este momento, las lágrimas. La hermana de Edwin revelaba entonces que sus padres permanecen "encerrados porque no quieren hablar con nadie" y atravesando su duelo en la intimidad.

Por otra parte, Darling Arrieta ha asegurado que tanto ella como su familia no quieren la pena de muerte de Daniel Sancho. "Nunca mi familia quiso la pena de muerte porque somos creyentes y solo Dios da la vida y la quita. Nos sentimos satisfechos de que solo haya sido cadena perpetua", ha declarado. Mientras la familia de Edwin Arrieta no va a recurrir, el abogado de Daniel Sancho, Marcos García-Montes, anunció que la defensa del joven sí recurrirá.

Ha pasado un año desde el suceso hasta conocer la sentencia, que a pesar de haber dado paz a la familia no devolverá la vida a Edwin Arrieta. Su hermana confesaba que no puede ver imágenes de Daniel Sancho porque le recuerdan "la herida que está ahí".

"Verlo es imaginar cuando torturó a mi hermano, cuando lo descuartizó... ¿Estaría aún vivo cuando iba cortándole capaz de su cuerpo? Para mí verlo a él es horrible. Me trae ese dolor y me reviva esa herida que está ahí", se sinceraba.

En 'La sentencia de Daniel Sancho' se han recopilado las distintas versiones que dio Daniel Sancho sobre lo que sucedió. Aunque la sentencia en el Tribunal Provincial de Koh Samui le condena por asesinato premeditado, aún se desconoce la causa de la muerte de Edwin Arrieta al no haberse proporcionado la sentencia.

En el programa, Darling Arrieta ha recordado cómo vivió la desaparición de su hermano en Tailandia. La hermana del cirujano intercambió mensajes con Daniel Sancho preguntándole por su paradero. Notó una tranquilidad abrumadora para lo que estaba sucediendo. Eso fue lo que terminaría por despertarle las sospechas y moverse para averiguar qué había pasado.

"Darling atribuye a la intervención divina la detención de Daniel Sancho y ella se resta de una ecuación que es fundamental. Si ella no se preocupa por localizar a la persona que está con Edwin, Daniel Sancho hubiera cogido un avión y los trabajadores del vertedero habrían descubierto unos restos sin equivalencia en la comisaría. Nadie había denunciado su desaparición. Nadie conocía a Edwin Arrieta y podría haber sido un turista más que pasó una noche de farra y no apareció", concluía en el programa el periodista Alfonso Egea.