Bajo el lema ‘El virus del herpes zóster vive en ti. Adelántate’, la biofarmacéutica GSK tiene como objetivo visibilizar esta enfermedad y su reactivación de la infección por el virus varicela-zóster. Para ello, han creado una campaña simulada con varios vídeos en los que se muestran serpientes atacando algunos monumentos de España y provocando en sus rostros un herpes zóster.
Durante estos últimos días, en las redes sociales se han viralizado una gran cantidad de vídeos en los que se muestran serpientes ‘atacando’ varios monumentos de España, como la fuente de Cibeles (Madrid) o la Glorieta de Gustavo Adolfo Bécquer (Sevilla). En todos ellos, las serpientes acababan rodeando las estatuas y mordían sus caras, provocándoles un herpes zóster.
Sin embargo, estos vídeos no son reales, sino que se trata de una campaña de concienciación cuyo objetivo es visibilizar la enfermedad del herpes zóster, que ocurre debido a la reactivación de la infección latente por el virus varicela-zóster. Para esta innovadora campaña, se ha utilizado el tipo tecnología llamada ‘FOOH’ (Fake Out of Home Advertising) que aprovecha la tecnología ‘CGI’ (Imagen Generada por Computadora) para crear vídeos 3D realistas.
Con ‘El virus del herpes zóster vive en ti. Adelántate’, GSK divulga de una forma original la presencia del virus en nuestro organismo y que puede reactivarse en forma de herpes zóster a medida que cumplimos años y nuestro sistema inmunitario pierde la capacidad de mantener al virus controlado.
Lamentablemente, el Herpes Zóster es una patología muy frecuente España. Se estima que 1 de cada 3 personas de entre 50 y 90 años, tendrán un episodio de esta enfermedad a lo largo de su vida. Por ello, GSK quiere concienciar a la población del riesgo de padecerlo y de la severidad de esta enfermedad que afecta la calidad de vida de las personas que lo padecen y que les causa un dolor que puede persistir a largo plazo.
Alberto Clemente, director del área de vacunas de GSK España, ha hablado sobre la campaña y aseguran haber “querido ir un paso más allá, tratando de sensibilizar al público acerca de qué es el herpes zóster, el riesgo de padecerlo y el impacto que puede suponer en sus vidas”.
GSK también ha realizado una encuesta el pasado 2023 a 3.500 adultos mayores de 50 años y de 12 países diferentes para saber si conocían realmente el impacto que puede tener ‘la culebrilla’ en sus cuerpos. Los resultados arrojaron una falta de concienciación sobre el dolor que les puede causar el herpes zóster y 1 de cada 10 adultos encuestados no conocen los síntomas. Además, más de una cuarta parte (28%) cree que la enfermedad es incluso “inofensiva”.
Ante estos resultados tan preocupantes, Glòria Mirada, Enfermera y Vicepresidenta de la Asociación Española de Vacunología, insiste en que “el herpes zóster no solamente se trata de una erupción en la piel, sino que es una infección que puede ser mucho más seria, que además, puede comportar complicaciones como la neuralgia postherpética, un dolor persistente que puede durar mucho tiempo, incluso años en algunos casos”.
La enfermedad del herpes zóster es una infección viral que puede llegar a ser muy dolorosa e incómoda para quienes la padecen. Los síntomas pueden ser muy variados (picazón, dolor, hormigueo…) y es muy importante estar atentos a nuestro cuerpo si detectamos alguna señal del virus.
En cuanto a su evolución, el herpes zóster suele empezar con síntomas como picazón, dolor, hormigueo, sensación molesta o sensibilidad al tacto en la piel del tórax, abdomen o rostro. Pasados los primeros días, comienza su fase aguda, en la que aparecen una serie de ampollas agrupadas en forma de ‘culebrilla’.
Al cabo de unos 10 días, estas vesículas se convierten costras que suelen durar entre 2 y 4 semanas. Sin embargo, pese a que estos granos desaparezcan pasado ese tiempo, el dolor puede persistir, apareciendo la llamada neuralgia postherpética (NPH), un dolor crónico que llega a durar varios años. De hecho, la NPH es la complicación más común del herpes zóster y afecta a 1 de cada 10 personas.
Por desgracia, el herpes zóster y su impacto no solamente se queda en la aparición de las ampollas en la piel. Su dolor puede afectar a todas aquellas actividades que realicemos diariamente y, en definitiva, empeora nuestra calidad de vida. Además, en el caso de la neuralgia post herpética, puede causar ansiedad, insomnio y depresión.
También, y dependiendo de la zona en la que afecte, puede llegar a la pérdida de visión (si aparecen en los ojos). El herpes zóster también funciona como indicador de que nuestro sistema inmunológico se está debilitando y que estamos más susceptibles a otras infecciones.
Para más información, consulta sobre el herpes zóster en https://virusherpeszoster.es/el-herpes-zoster-vive-en-ti-adelantate.html?amp=true.