¿Terminará este 2020 con una blanca Navidad? Los modelos meteorológicos empiezan a sugerir que sí. La irrupción del frío atmosférico llegaría pasado el día 25, y para el 28 tendríamos una borrasca rozando la Península, si la previsión se cumple. Aún es pronto para confirmarlo, pero es un comienzo. Esto es lo que pronostican por ahora.

La semana está siendo movidita en Galicia. El Atlántico está muy activo y, en las últimas horas, ha favorecido la rápida profundización de una borrasca al noroeste de la península Ibérica por ciclogénesis cuasi explosiva. A esta hora esa borrasca nos deja un frente que deja precipitaciones fuertes en Galicia, pero a medida que el frente se adentre en la Península, repartirá precipitaciones que serán más débiles.

El resto de la semana tendremos un desfile de nuevos frentes por el flujo de borrascas desde América del Norte, que ondulará mucho el chorro polar. Así, los vientos del oeste, y puntualmente el noroeste y suroeste, seguirán dominando hasta bien entrada la semana que viene, con lluvias generalizadas el domingo día 20.

El modelo europeo ECMWF, el más confiable, prevé un asentamiento del anticiclón en el Atlántico Norte hacia el día de Navidad. Esto facilitará que el chorro polar nos traiga una borrasca y el consecuente descuelgue de aire frío, además de la posible formación de un embolsamiento de aire frío en altura al oeste de la Península. En el este de Europa, en cambio, esto se traducirá en la llegada de aire cálido.

El modelo americano GFS, por su parte, pronostica la formación de una potente borrasca al oeste de la Península alrededor del domingo 27, rozando Portugal, que traería bastante entretenimiento meteo los últimos días del 2020. Esta borrasca generaría precipitaciones sobre todo en el cuadrante suroeste peninsular y en la mitad sur de la vecina Portugal.

*Temperatura y geopotencial a 500 hPa previsto por el modelo GFS entre el viernes 25 y lunes 28 / Tropical Tidbits

Ambos modelos coinciden en que la nieve podría reaparecer en las montañas de la mitad norte entre los días de Nochebuena y Navidad, y de nuevo los días siguientes, según el GFS. Esto dependerá de si finalmente el frío nos llega como está previsto o se queda en latitudes más elevadas.

Habrá que esperar a estar más cerca de la fecha para confirmar si tendremos la ansiada “blanca Navidad” o por el contrario nos espera un ambiente más calmado, como sugieren el modelo CMA de la Administración Meteorológica de China o el Modelo Ambiental Global Multiescala GEM.