Los detalles sobre la opinión de la familia de Esther López en 'El programa de Ana Rosa'. Las declaraciones de los amigos de la víctima se contradicen, las dos últimas personas que estuvieron con ella dan versiones opuestas. Carolo desmiente la declaración de Óscar y asegura que "no sabe si quería seguir de fiesta".
Natalia Ultrán cuenta cómo ha reaccionado la familia: "Sigue pensando lo mismo desde que apareció el cuerpo". Además, la reportera asegura que "les cuesta mucho pensar que el cuerpo estuviera ahí desde el principio y apuntan hacia Óscar". Traspinedo se vuelca con la familia y también acusan al principal sospechoso. En la entrada de la casa del amigo de la joven, continúa la pintada de los vecinos que le ordenan que "cante". También se ha retirado un cartel en el que se leía: "Tick, tack, te queda poco tiempo, no nos vas a engañar ni a España ni a todo Traspinedo".
Óscar ha declarado hasta en seis ocasiones, tanto como testigo como investigado, y se encuentran contradicciones en relación a la tecnología. La familia de Esther piensa que "no lo hizo solo, alguien tuvo que ayudarle". El sospechoso no aclara los indicios que le incriminan en el caso, contestando en varias ocasiones que "no tiene explicación", y desvía las culpas a otros amigos de la víctima que han desmentido sus acusaciones.
Otros amigos del sospechoso declaran que "nunca les ha gustado el ambiente en el que se movía". Se pronuncian para ayudar a la Guarda Civil a elaborar un perfil de Óscar. La policía entrevista a amigos y familiares del sospechoso: "Óscar se iba a tomar una cerveza un viernes y volvía el domingo. Algunas veces tuvimos que buscarlo". El entorno señala que salía habitualmente y cometía excesos. La noche de la desaparición de Esther estuvo durante horas en un bar del municipio: "Entre las 22:40 y las 1:50 estuvieron todo el rato, de continuo, jugando a las recreativas y fueron pidiendo botellines de quintos de cerveza".
"Entiendo que le iba bien por el tipo de vida que llevaba, incluso tenía una caja fuerte con dinero, pero no sé cuánto había exactamente", señala otra testigo. Al parecer, el sospechoso incurría en comportamientos que ocasionaron problemas con su entorno y con sus propiedades. Gestiona varias empresas y tiene una casa e Valladolid: "Estuvo a punto de venderla porque tuvo problemas de liquidez. Hablamos de tres años atrás, pero esto está solventado y no conozco que Óscar tenga interés de vender su piso".