'El programa de Ana Rosa' tiene acceso en exclusiva a las imágenes del sumario en el que aparece el cráneo decapitado de la víctima de Jesús Mari, protagonista del crimen de Castro Urdiales. La cabeza estaba envuelta en varias hojas de periódico, una bolsa azul y, todo esto, se encontraba en el interior de un neceser.
Carmen Merino, principal sospechosa del crimen, llegó a justificar la ausencia de la víctima diciendo que "estaba en Punta Cana, con fulanas". Luego, le prestó un neceser a una amiga pidiéndole que se lo guardara porque allí dentro había juguetes sexuales y le daba vergüenza que lo viese la Guardia Civil.
Pasaron meses y el neceser estaba en el domicilio de su amiga. Esta, harta de pedirle a Carmen que recogiera su propiedad, le avisó con abrirlo: "Le dije que viniera a recogerlo porque sino lo abría". La acusada, alertada, le rogó que no lo hiciese.
Sin embargo, tiempo más tarde, al ver que el neceser de lunares seguía en su casa, la amiga decidió abrir y ver qué había dentro. En él había una bolsa azul, al abrir esta se encontró con una gran bola cubierta por hojas de papel. Hasta cuatro capas tenía el cráneo y a medida que iba quitando hojas el olor era más fuerte.
"Abrí la última y vi un cráneo, lo cerré todo rápidamente y fui a casa de mi hermana", dice la amiga. Los nervios se apoderaron de las dos, que informaron a los agentes. En las imágenes se ve cómo las hojas de periódico eran de un crucigrama, fechadas en el 10 de febrero, que la propia asesina habría completado.