Han sido agredidos otros dos policías en las últimas horas, uno en Pontevedra y otro en Sevilla. 'El programa de Ana Rosa' da todos los detalles acerca de estas dos agresiones e informa sobre la nueva hipótesis del asunto de Andújar, un policía que acabó falleciendo junto al agresor.
Un joven de 26 años entró a la comisaría de Pontevedra y apuñaló a un policía, aunque lo detuvieron al momento. En Sevilla, otro agente es agredido al intentar detener a unos delincuentes en Isla Mayor.
Sobre el caso de Andújar, en Jaén, un policía nacional falleció por un disparo sin voluntad de su compañero y actuó para salvar la vida del segundo agente al que el agresor daba puñaladas y martillazos. En las últimas horas, se barajan nuevas hipótesis sobre cómo alcanzó la bala de un policía a su compañero, causándole la muerte.
Aunque en esta intervención sonaron tres disparos, la hipótesis que más se está estudiando es que la bala rebotara en las monedas del bolsillo del agresor y alcanzara al otro agente de policía, o que le traspasara y rebotara en la pared. Lo que sí es cierto es que llegó al otro agente, a Juanjo, quien falleció por esta bala.
Tras estas agresiones continuas a policías, algunas comisarías de España están adquiriendo las pistolas taser, las cuales generan una descarga eléctrica que inmoviliza a un potencial agresor, pero la mayoría de comisarías no han llegado.
Nuestro programa se desplaza hasta el lugar de los hechos, todavía queda rastro de la sangre del agente y el reportero informa de todos los detalles del suceso que ha terminado con la muerte de un policía. El periodista, tras ver la escena del crimen y de la agresión, confiesa a la audiencia: "Si no hubiese sido por la intervención de José Alberto, probablemente el segundo policía habría fallecido".
La persona que actuó explica al periodista cómo ocurrieron todos los hechos: "El tipo estaba amenazando a una persona, vemos cómo llegan los nacionales, se baja el copiloto y lo intenta disuadir diciéndole que tire el arma porque llevaba un cuchillo y martillo".
"De repente, se avalanza sobre él, le empieza a pegar martillazos y cuchilladas", dice todavía con el tono impactado. El testigo, recordando aquel momento, detalla qué pasó: "Me percato, pensé que se lo teníamos que quitar de encima porque lo iba a matar, salí a correr y le pegué una patada".