La erupción del volcán en La Palma ha activado la alerta roja, la lava de ocho bocas avanza y ya hay 5.000 personas evacuadas y podría afectar a 10.000 vecinos de la zona. En 'El programa de Ana Rosa' hablamos con una vecina de Santa Cruz de la Palma.
Antes de la entrevista, el sismólogo Domínguez proporciona todo tipo de detalles sobre el futuro del volcán y los efectos que la lava podría realizar en la tierra y en el agua: "Hay coladas de lava que pueden alcanzar los tres o cuatro metros, desde esa ladera hasta el mar todo es bajada...".
A pesar de ser consciente de que reside en una tierra de volcanes, Nieves explica que "por mucho que lo sepas. Hasta que no lo ves explotar. Sobre todo el ruido, el ruido, a mí me tiene loca el ruido". Uno de los miedos de la vecina de la zona es "las casas que se van perdiendo y la vegetación que vamos perdiendo y los animales".
Nieves intenta buscar el lado positivo de lo que está ocurriendo, "cuando termine todo diremos...Es bonito por la lengua de lava que queda y la otra parte bonita del volcán, vamos a pensar en eso". La presentadora tiene la duda de si ya hay un ambiente especial o algún olor tras la erupción, Nieves comenta que por el momento no, "hay una nube blanca, nunca la había visto, parecía calima, pero no".
De todos los factores que han surgido como consecuencia de la explosión volcán, para Nieves lo más impresionante es "el ruido, parece el ruido de un avión, un rugido constante que no para, que lo tienes metido en el oído". La vecina de La Palma cree que "no va a haber víctimas, la parte bonita es que es un volcán y es parte de la naturaleza".