La directora de una residencia de mayores se muestra destrozada en 'El programa de Ana Rosa, por la falta de comida en el centro. Comienzan a escasear los alimentos, principalmente los perecederos, la fruta y los productos frescos. Algunos centros advierten de que solo tienen garantizada la comida de una semana y alertan que la falta de abastecimiento puede dejar sin comer a sus usuarios.
Sandra Cuesta, directora del Hospital Asilo de Luarca, se muestra preocupada ante la complicada situación a la que se enfrentan: "Nosotros levantamos la alarma para tomar medidas como plan de contingencia previo a que llegue un desastre". La mujer comenta que ellos no son "una fábrica, no podemos parar la producción". La directora señala sobre los usuarios de su centro: "Aquí viven personas mayores y no podemos estar a estas alturas, después de dos años de pandemia, con un riesgo de suministro para ellos, eso es inconcebible".
"Los manifestantes están en su derecho de defender lo suyo, pero pido que alguien tome medidas para evitar esta preocupación que tenemos", reclama la directora. Cuesta explica cómo afecta la escasez de abastecimiento a las comidas de los mayores: "Estamos hablando de unas 300 comidas al día, el personal está teniendo que usar sus vehículos personales para desplazarse a buscar alimentos donde los haya".
Las residencias se ven obligadas a congelar alimentos para tener provisiones para la semana que viene. La mujer añade sobre su búsqueda de alimentos: "Es un problema porque podemos generar desabastecimiento para el público de a pie". La directora rompe a llorar al recordar lo dura que fue la pandemia para los más mayores y explica que los profesionales "están agotados". A la mujer se le quiebra la voz ante la preocupación por no poder dar de comer a los usuarios del hospital antes de cortar la conexión.