Joaquín Prat vive en 'El programa de Ana Rosa' una de las entrevistas que más le ha llegado al corazón y que termina emocionándolo en pleo directo. El presentador charla con el padre del bebé secuestrado en el Hospital de Basurto, conoce cómo vivieron los padres las horas sin el recién nacido y qué sintieron al reencontrarse con su hijo.
El padre del bebé explica cómo ocurrió el robo de su hijo: "Fui a casa con mi hija mayor de tres años, mi mujer me llama diciendo que nos iban a dar el alta, que una enfermera se llevaba a nuestro hijo para hacerle unas pruebas, como la prueba del talón, y así liberábamos camas porque había mucha saturación de partos". Pedro Castro confiesa a Joaquín Prat: "Yo pensé 'qué raro, si esa prueba se hace a las 48 horas'... cuando llego al hospital mi hijo no está en la cuna, me empiezo a poner nervioso, salgo a preguntar y cuando veo que los sanitarios se empiezan a extrañar, ahí me vuelvo loco".
Una historia que tuvo un final feliz gracias a que los agentes de la Ertzaintza encontraron al recién nacido a las 08:30 horas de la mañana. Joaquín Prat, que escuchaba atentamente al padre, no pudo evitar emocionarse al ver cómo narraba el reencuentro con su hijo: "Vino la ambulancia, pegué un salto para dentro, cuando vi que Aimar estaba bien fue uno de los momentos más felices de mi vida".
El presentador, con lágrimas en los ojos, se emocionó todavía más al conocer cómo fue el reencuentro del bebé con su madre. Patricia Pardo, que se percató de os sentimientos de su compañero, le dice tras la entrevista: "Te has emocionado, vikingo". Joaquín Prat, con una sonrisa, contesta: "Yo sí... bueno, nos hemos emocionados todos".
Pero el momento en el que Joaquín Prat más se emociona llega cuando vuelven a ver la parte de la entrevista en la que el padre habla sobre cómo cogió la madre a su bebé tras el secuestro. Al terminar el vídeo, la cámara enfoca al presentador y este no puede decir ni una sola frase. José María Benito, que ve los ojos llorosos de su compañero, comenta: "Te quedas sin palabras...". Joaquín Prat, consciente de su emoción, contesta: "Es verdad"