Exclusiva | El Príncipe Africano, arrepentido de sus fiestas VIP ilegales: “Quiero pedir perdón a España por haber celebrado estas reuniones”
Marta Riesco habla en exclusiva con Randy Koussou en el interior del famoso chalé de Aravaca
Randy Koussou niega que hubiera 200 personas en la casa y que pagaran 600€ por entrar
El Príncipe Africano asegura tener carnet de diplomático y hablar de la situación política de su país en la televisión francesa
Tras ser testigos de una nueva fiesta ilegal lujo en el chalé que tiene alquilado en la localidad madrileña de Aravaca, ‘El programa de Ana Rosa’ ha podido hablar en exclusiva con Randy Koussou Alam-Sogan, el empresario conocido como el Príncipe Africano, quién ha asegurado que se arrepiente de haber celebrado las fiestas VIP ilegales, pero se muestra contrario a las formas en la que se ha tratado su actuación.
Marta Riesco, reportera de ‘El programa de Ana Rosa’, ha conseguido entrar al interior del famoso chalé en el que futbolistas, actores y todo tipo de VIP se saltan la Ley acudiendo a las fiestas privadas de Ransy Koussou, el famoso Príncipe Africano y ha podido hablar con él en exclusiva. “Quiero pedir perdón a España, al Gobierno, a la policía por haber celebrado en estas reuniones que no deberían haberse celebrado. Con lo que no estoy de acuerdo es con las formas con las que se ha tratado”, así comenzaba Ransy su entrevista de arrepentimiento.
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¿Eres príncipe y de dónde eres príncipe? Ha sido la primera pregunta a la que ha respondido Randy Koussou Alam-Sogan, ante las cuales no ha puesto ningún impedimento. Según ha explicado Marta Riesco, la noche anterior se puso en contacto con el Príncipe Africano por Instagram, él le contestó y le invitó a desayunar en su casa al día siguiente. Incluso, le preguntó que qué querían desayunar ella y el cámara, y sus deseos se han cumplido.
Randy no ha negado en ningún momento que hubiera celebrado una fiesta multitudinaria, pero sí ha querido aclarar que esa no era su intención, que él invitó a unas pocas personas y que unos se fueron invitando unos a otros y el número de asistentes se le fue de las manos. Además, ha negado en rotundo que fueran 200 personas y ha reconocido un máximo de 85.
Respecto a la cuantía de la fiesta, el Príncipe asegura que solo cobraba 50€ a la entrada para el servicio de limpieza. Que el dinero lo pedía una chica a la entrada y que si alguno de sus invitados promotores de eventos cobró otros precios, él no es responsable ni tiene conocimiento “No cobré ese dinero”. También de forma rotunda, niega la venta o distribución de sustancias en su casa, asegurando que tiene a dos amigos de seguridad que están pendientes de ese asunto “No permito el tráfico de sustancias”.
Randy promete que no volverá a celebrar ninguna fiesta mientras que viva en España y se muestra indignado por la reputación que se le está creando ya que es conocido en Francia por hablar de la situación política de su país y que no es justo que aquí se le conozca solo por celebrar fiestas. Respecto a su profesión, explica que tiene el carnet de diplomático y que es un importante empresario.