Todos los medios hablan de la desarticulación de Akrab gracias a un colaborador de los servicios secretos franceses cuya identidad no ha sido desvelada. Khaled es considerado un héroe y recibe felicitaciones de las más altas instancias. Aunque Fátima no quiere acompañarle a Granada, la esperanza de volver a ver a Nayat le hace cambiar de planes y accede a acompañar a su marido a la ciudad andaluza.

