José Espada, dispuesto a matar a María para salvar a su hijo

Lejos del pueblo, José deja el coche y le pide a María que se baje para ir a buscar otro coche. No es cierto, lo que Espada intenta es llevar a la que había sido su amante a un lugar alejado para matarla, tal y como Joao le había ordenado si quería salvar la vida de su hijo Samuel. Solos, con María de rodillas y de espaldas y él apuntándole a la cabeza, José no fue capaz de apretar el gatillo.