Llegar al éxito no ha sido un camino nada fácil para Omar Montes. Su vida ha estado señalada por muchos momentos difíciles tal y como cuenta en su nueva docuserie 'El principito es Omar Montes' en Amazon Prime Video. Omar viene de una familia muy humilde, trabajadora, que no ha tenido una vida fácil y que, además, ha tenido que sanar las cicatrices de un pasado aterrador marcado por el bullying y el acoso escolar.
El cantante cuenta que sus problemas empiezan desde muy pequeño y que se metían con él por ser diferente. Le insultaban por "tener las orejas de soplillo, ser gordo, moro, gitano… era el blanco fácil de todo", explica. Pero la cosa llegó a más con el tiempo. "Una vez me desfiguraron la cara en el patio", cuenta el cantante. Sin duda es un episodio que no se le va a olvidar nunca por todo lo que sufrió.
Aunque explica que él no se daba cuenta de la situación, le trajo consecuencias tales como no querer salir de casa, no querer jugar con otros niños…y, por supuesto, los daños que sufría. Pero el bullying no solo se quedó en el colegio, Omar también sufrió acoso por parte de sus amigos del pueblo. Allí las cosas también su pusieron bastante feas y un día, jugando con sus amigos, le tiraron de un empujón por el muro de un cementerio. Se dio con una piedra en la cabeza y perdió el conocimiento.
En la docuserie, Omar se reúne con un grupo de adolescentes para hablar del tema y se produce un momento muy emotivo con una de las chicas. Ella cuenta que sufrió bullying y la increparon por la muerte de su padre. Le decían cosas como: "Te mereces que se haya muerto tu padre porque te mereces la vida de una perra". La chica, con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada, comparte ese duro momento con el resto y Omar no duda en arroparla y ayudarla. "Seguro que tu padre te está viendo desde ahí arriba y te está cuidando. Tu padre estaría orgulloso de tener una niña como tú de valiente que, aunque le pasen esas cosas, sigue ahí luchando. No estés triste que eres una campeona", le dice mientras le da un abrazo. El cantante lanza un consejo para los chicos que están en esa situación: que sepan pedir ayuda y se dejen ayudar, que crean en ellos mismos, estudien, se formen y no se rindan nunca.
Ángeles Montes, madre de Omar, cuenta en la docuserie cómo vivieron ella y sus padres esos duros momentos en los que su hijo volvía a casa con la cara ensangrentada y contando que le habían pegado. "Un día me dijo: Mamá, cuánto más me pegan, más fuerte me hago. Eso me destrozaba", recuerda. La madre nunca entendió qué pasaba con su hijo y por qué querían "masacrarlo" de esa manera.
Rota de dolor y llena de lágrimas, cuenta que su hijo ha vivido muchas cosas por venir de la familia que venía y que lo han pasado muy mal: "Un niño es un niño siempre y no tiene la culpa de nada". Su abuela y su madre se cansaron de la situación y le dijeron que no saliese más a jugar con esos niños. La abuela lo resume todo en un comentario que le hizo un día uno de los acosadores: "Dile a Omar que salga que ya no le vamos a pegar más". Pero ella cree en el karma y que, después de todo lo ocurrido, la vida ha premiado a su nieto.
Omar conoció el teatro en el colegio y le sirvió como vía de escape para evadirse de todo lo que le pasa en ese momento. Le ayudó, además, a hacer más amigos y a ser un niño más. Su profesora Belén recuerda con cariño esos momentos, alabando el papel de Omar como actor. Además, cuenta que un día iban a hacer el musical de Peter pan con Omar como protagonista. Pero durante los ensayos, se dio cuenta de que podía hacerlo mucho mejor siendo El capitán Garfio. "Hizo un papel de Oscar", cuenta su profesora. En ese momento, el cantante se empieza a sentir alguien y que puede ser feliz. Y es que como bien dice su abuela: "Artista ha sido siempre".