En su paso por ‘El musical de tu vida’, Loles León recuerda y rinde homenaje a la artista italiana Raffaella Carrá, con la que trabajó durante cuatro años en televisión y forjó una gran amistad.
Loles cuenta que fue el guionista y director Juan Luis Iborra quién la llevó al programa de Carrá '¡Hola Raffaella!', ya que estaba buscando trabajo. “El primer día que llegué, me estaba maquillando y ella llego y preguntó: ¿quién es Loles…?”, recuerda León con acento italiano, imitando a Raffaella. Pero cuando Carlos Sobera le alaga diciendo que está haciendo una buena imitación de la italiana, Loles se emociona al recordar a su amiga.
“Ella me enseñó todo lo que hay en la televisión, porque ella lo sabía todo y trabajé con ella cuatro años, que fueron maravillosos”, relata Loles, y añade que nada más enterarse que no tenía trabajo, Carrá le dijo “pues te contrato”.
Carlos Sobera pregunta a Loles cómo fue la transición de trabajar con Raffaella a convertirse en íntimas amigas.
“Raffaella es muy niña, muy sencilla, lo que más le sale en su vida privada es jugar y bromas, todo esto le encanta. Y yo claro, no paraba de contarle de todo, de hacerla reír… Siempre estaba con mis disparates y mi manera de ser, y a ella le encantaba”, narra Loles sobre cómo era Carrá detrás de las cámaras.
La actriz española cuenta también que Raffaella confiaba plenamente en ella durante los programas de televisión: “Yo no pasaba la escaleta. Ella no quería. “Loles dejadla, me encanta que me sorprenda”, recuerda con cariño sobre la que fue su amiga.
Loles León recibe por sorpresa un mensaje de su amigo Juan Luis Iborra, en el que animaba a la actriz a que contara "la anécdota del jamón para Raffaella".
“A ella le gusta mucho el jamón. Hablo en presente porque para mi es que se ha ido a hacer una gira", recuerda Loles León emocionada sobre Carrá.
León explica que Raffaella la invitó a Porto Santo Stefano, su casa de veraneo, y que hablando con Iborra de qué llevar de regalo, este pensó que el jamón era la mejor elección: “Compramos una pierna de jamón inmensa, de Guijuelo, y digo “dónde meto esto, que me tengo que ir en avión” y cogí y compré una bolsa de estas que llevan los tenistas y metí ahí el jamón”, relata la actriz entre risas.
Sobre los controles de aduanas por el transporte de comida a Italia, Loles cuenta con gracia que defendía que “eran sus raquetas, que se iba a hacer un torneo a Italia” y que encandiló a los inspectores de aduanas, para que no llegaran a inspeccionar la bolsa.
“Cuando llegue ahí, a Porto Santo Stefano, abro la bolsa de las raquetas, saco el jamón, y Raffaella se volvió loca”, prosigue entre risas. Historia que remata añadiendo que “no se llevó cortador de jamón” y que le tocó encargarse a ella personalmente.