Rubén Ramallo, en su incorporación a la unidad de Desapariciones, tras estar infiltrado por la Unidad de Estupefacientes como sicario de los hermanos Reyes, intenta hacerse un hueco entre sus compañeros, y es que después de terminar en el equipo, ellos no se mostraban nada de acuerdo con la decisión, especialmente Sonia Ledesma, con la que ahora está intentando acercarse.

Después de que la resolución del caso de Lidia acabase en tragedia para uno de los hermanos Nano Reyes ante el disparo de Ramallo, en aquel momento conocido como Spider. “Se ha soltado, se me ha echado encima…”, le explicaba él a Sonia cuando llegaba al lugar de los hechos y ella tenía que declarar ante lo ocurrido.

“Me han llamado de régimen, me dijeron que no van a seguir con la investigación, que mi versión encaja con las periciales, así que gracias”, le dice él al encontrarse en el ascensor, algo por lo que ella pregunta por qué le da las gracias: "Yo solo he dicho la verdad que no vi nada”. “Y que no tenías ningún motivo para dudar de mi versión", añade él. Tras esto, ella le pide dejar este tema a un lado, aunque afirma que cree que tendría que buscar otro destino porque no encaja demasiado en el equipo. "A lo mejor encajo más de lo que crees, ¿sabes cuál es la función de una oveja negra? Provocar, agitar al rebaño y demostrar que existen otras cosas de hacer las cosas” “Existe la manera correcta, seguir el reglamento”.

“Solo por curiosidad, si tú eres la oveja negra, qué función tengo yo en el rebaño”, se interesa ella y él le asegura que ella es “el mastín”. Al salir del ascensor Sonia le dice que sale "detrás de él" y Ramallo pregunta: "¿Eso es un principio?".

También se toman un café juntos. “Creo que tendríamos que decir unas normas de convivencia, somos profesionales y me parece una tontería estar peleados todo el día”, le propone ella y dice lo que le pide: “No quiero que me vuelvas a avasallar en el ascensor”. Cuando le toca el turno a Rubén lo deja bien claro: “Nada, no me molesta nada de ti”.

Y cuando vuelven a coincidir en el ascensor, ella le pide que baje él primero, cuando él insiste que él lo haga primero, Sonia decide que ambos pueden bajar juntos: “Esto es una bobería”. “¿Después una copa?”, le pregunta él ante esto y ella responde: "¿Ves? Bajo yo sola”, pero ante la sonrisa que se le queda en el ascensor parece que no le ha parecido tan mal la pregunta de su compañero.