Belén López perdió a sus padres cuando tenía 23 y 24 años. La actriz le confiesa a Toñi Moreno cómo vivió esos años en los que la vida la arrebató lo que más quería: “Me salvó la vida mi familia y mi trabajo”, confiesa. ¿Cómo afrontó la actriz ese momento de su vida?
“Recuerdo que me senté en casa y dije ‘solo quiero un caminito para saber por dónde tengo que ir’, pero, al final, si hay una fuerza interior que, cuando alguien se va, parece que te posee porque te preguntas cómo voy a poder vivir sin ellos”, comenta Belén López. “El sufrimiento te da la oportunidad de crecer y de aprender”, añade.
Cada día, Belén López reconoce que se acuerda de sus padres, sobre todo por poder compartir con ellos las cosas buenas que le ocurren. De hecho, en ocasiones se sorprende al pensar que va a llamar a su madre para contarle algo, hasta que cae, en seguida, que no puede hacerlo: “Soy tan fuerte porque están conmigo”.
Belén López vive en una casa ubicada en mitad del campo, en Vejer de la frontera (Cádiz), donde cuida de animales y tienen un estudio de grabación: “Allí ningún día es igual, no tengo rutina ninguna”.
Belén López quiere dar una sorpresa a Luisa, la mujer que le crio, a la que lleva sin ver más de cinco años: “Mi madre estaba todo el día en la pelu. Estaba en casa, interna, tengo muchos recuerdos con ella”, nos adelanta la actriz. El reencuentro ha sido tan emotivo como divertido. Y es que a Luis le gustaba mucho Miguel Ángel Silvestre, quien fuera pareja de la actriz.