José María Almoguera desvela que ha ido a un mediador familiar con su madre: "No acabamos la sesión, la cosa no fue bien"

El acercamiento entre Carmen Borrego y su hijo José María Almoguera está cada vez más cerca. A pesar de que la hija menor de María Teresa Campos intervenía en directo durante la entrevista de su hijo en '¡De viernes!' en un tono que no era el que el motero esperaba, lo cierto es que Carmen ha agradecido, según su entorno más cercano, el ofrecimiento de su hijo para que ejerza por fin como abuela.

Ahora, tan solo una semana después de la entrevista de José María en el programa de Bea Archidona y Santi Acosta y tras numerosas críticas en los platós de televisión, madre e hijo se ven por fin las caras tras meses de conflictos públicos. Y es que desde que estallara la guerra familiar allá por el pasado mes de marzo, los encuentros entre Carmen y su hijo han sido escasos, tal y como la propia colaboradora ha explicado en ocasiones a sus compañeros de programa.

Carmen, totalmente resignada, parecía haber cerrado por completo la puerta a una reconciliación con su hijo tras los numerosos ataques de José María en conocidas revistas y después de una exclusiva junto a Paola Olmedo en la que ambos criticaban el papel de Carmen como madre e incluso como abuela. Pero nada más lejos de la realidad. José María Almoguera aprovechaba su primera entrevista en televisión para dejar la puerta abierta a su madre, aunque eso sí, con el paso del tiempo.

Durante su segunda entrevista en '¡De viernes!' José María Almoguera soltaba la bomba. Tal y como el hijo de Carmen Borrego desvelaba, hace algunos meses él y su madre acudieron a un mediador familiar para, por iniciativa de Jose, intentar poner solución al conflicto de manera privada.

Pese a que la intención era acabar con la tensión entre ellos, lo cierto es que la visita al especialista no salió como él esperaba:

"Esto no lo pensaba contar pero llegados a este punto lo voy a contar. Mi madre y yo intentamos ir a un mediador para arreglar las cosas pero no fue bien, ni siquiera acabamos la sesión. Fue después de que me convertí en padre y lo hice con la intención de arreglar las cosas con ella, con eso demuestro que yo sí me he preocupado por nuestra relación".

Carmen, que escuchaba con atención las palabras de su hijo desde otra sala, ponía en un principio cara de asombro por la confesión de José María, pero finalmente acababa reconociendo con gestos que sí, que ambos habían acudido a un profesional para solucionar sus problemas familiares.

José María ha confesado sentirse aún dolido con su madre porque, pese a que ha habido un acercamiento entre ellos, sigue sintiendo que su madre no le da su lugar públicamente:

"A mí me ha dolido que se haya dicho que yo he sido un mal hijo y hasta esta noche ella no lo haya negado, porque eso no es verdad y es duro, yo nunca he hecho nada como para que se elucubre sobre los supuestos problemas que yo le he dado a mi madre".