La tecnología al servicio de tu salud mental: Fitbit Sense y sus sesiones guiadas de mindfulness

Vivimos tiempos de incertidumbre, lo que a muchos nos genera estrés o ansiedad, dos problemas muy comunes en la sociedad y que siempre han estado presentes. Pueden ser consecuencia del trabajo, del teletrabajo, de la gran cantidad de cosas que nuestra vida nos exige a diario o simplemente de vivir sin saber qué puede pasar en un futuro inmediato. Por ello, los expertos recomiendan más que nunca cuidar nuestra salud mental para prevenir distintos problemas. Una de las técnicas más efectivas para aprender a gestionar estos conflictos son las técnicas de mindfulness, algo que existe desde hace años pero que ahora se ha recuperado para que podamos cuidar de nuestra mente tanto o más que de nuestro cuerpo.

Para que puedas hacer este hueco diario al mindfulness, la tecnología te puede ayudar: con el smartwatch avanzado de salud Fitbit Sense, vas poder identificar cuando tu cuerpo sufre cambios de estado de ánimo y aprender a gestionarlo gracias a herramientas como sesiones de respiración guiada, audios de mindfulness temáticos y recordatorios de que hay que tomarse un tiempo para sí mismo todos los días.

Para empezar, debemos tener claro el concepto de mindfulness. Según los expertos, el mindfulness es el arte de hacer conscientes algunas sensaciones de nuestro cuerpo que suelen pasar desapercibidas. En otras palabras, y tal y como dice el doctor en Psicología y responsable del Instituto EsMindfulness Andrés Martín Asuero, es la capacidad de prestar atención a lo que se hace, cómo se hace, cómo te sientes con lo que haces y qué impacto tiene todo esto en ti. Básicamente, concentrarse en lo que está pasando en el momento presente, aquí y ahora.

Para poner en práctica lo anterior, hay dos tipos de entrenamiento. Por un lado, podemos encontrar el entrenamiento formal o prácticas de meditación. Este tipo de práctica es la que realizamos mientras estamos quietos, ya que se trata de parar y sentir. Dejar lo que estés haciendo durante un tiempo, controlar la respiración y dejar la mente en blanco. Esta técnica es perfecta para desconectar y que nuestros problemas desaparezcan, al menos por un rato.

Por otro lado, también existe el entrenamiento informal, que es mucho más práctico y lo llevamos a cabo mientras realizamos otras acciones: centrarnos en el ejercicio cuando estamos entrenando, sin pensar en factores externos podría ser un ejemplo. Es decir, concentrarte en la acción que estás realizando, vivir el presente y no empañar lo que estés haciendo con ruido o pensamientos ajenos a la actividad que estás realizando

Son muchos los beneficios que nos aporta el mindfulness, en todos los sentidos y a todos los niveles, pero aquí te dejamos algunos de los más importantes.

Sí, el mindfulness ayuda combatir el estrés y la ansiedad porque nos lleva a un estado de calma, serenidad y claridad mental. Esto hace que los niveles de cortisol, que es la hormona que liberamos en situaciones estresantes, disminuyan. Además, ayuda a prevenir problemas como la hipertensión, los problemas de corazón o los trastornos del estado de ánimo, que aparecen muchas veces a causa del estrés y la ansiedad.

Esto también repercute en nuestro descanso, y por ello estas técnicas ayudan a combatir el insomnio. Al estar nuestro organismo en un estado de relajación, la persona entra en un estado favorable para incitar al sueño y mejorar la calidad de su descanso.

Si hay algo a lo que el mindfulness ayuda es a concentrarnos en una sola cosa, ya sea una acción sencilla o complicada. Digamos que nos ayuda a centrarnos en la actividad que estemos realizando en un momento determinado, enfocándonos en la acción presente.

También nos ayuda a conocernos a nosotros mismos, a reconocer nuestras emociones y a saber cómo nos afectan determinadas situaciones. Este control y autoconocimiento de nuestras emociones repercute directamente en una mejor gestión de nuestras relaciones interpersonales.

Uno de los objetivos del mindfulness es que consigamos centrarnos en el presente, y esto hace que la persona se sienta más libre y creativa. Esto se produce porque, al estar nuestra mente libre de preocupaciones y emociones negativas, tiene más espacio para ideas nuevas y emocionantes.

La tecnología ha llegado para quedarse. Entre sus funciones principales está la de hacer nuestra vida un poco más fácil, y si además puede ayudarnos a llevar una vida más sana y feliz, mucho mejor. Esta es la idea de Fitbit Sense, el smartwatch de salud más avanzado de Fitbit que te ayuda a llevar una vida llena de salud física y mental.

Fitbit Sense tiene numerosas funciones para velar por nuestro bienestar. Para empezar, posee un sensor EDA que ayuda a entender y, por lo tanto, a gestionar mejor el estrés. Su misión es poder conocernos más a nosotros mismos, saber qué acciones nos generan más estrés, ver cómo nuestro cuerpo reacciona a ello y aprender a gestionarlo de forma eficiente. Para ello, Fitbit Sense cuenta con una multitud de sensores de última generación (sensor EDA, sensor de frecuencia cardiaca) que recopila datos sobre nuestra salud y genera una puntuación diaria de los signos de nivel de estrés que presenta nuestro cuerpo. Toda esta información detallada se puede consultar en la app de Fitbit.

Pero no solo eso. Fitbit Sense también te ofrece la posibilidad de llevar a cabo sesiones guiadas de mindfulness, ¡y al alcance de tu muñeca! Sesiones de respiración guiadas de 2 a 10 minutos, en momentos en los que tu sensación de estrés sea más elevada son algunas de las soluciones que Fitbit Sense propone para disminuir tu nivel de estrés y ansiedad. También incluye sesiones telemáticas para ayudarte, por ejemplo, a conciliar el sueño por la noche.

Hacerle un hueco al mindfulness en tu día a día es cuidar de ti mismo en todos los aspectos. Trabajar la gestión de nuestras emociones mejora muchos otros aspectos de nuestra vida: te ayuda a mejorar la calidad de tu descanso y dormir mejor, el saber manejar las situaciones de estrés hace que la sensación se minimice, gestionar la ansiedad también hace que comamos de forma más saludable y tranquila, notarás un mejor rendimiento en el deporte, focalizando en los objetivos y, en definitiva, te hará mucho más feliz.