“El soul está siempre presente en nuestras vidas”
Anuncios, películas, en la radio…. El soul forma parte de la banda sonora de todos nosotros de forma mucho más constante de lo que creemos porque “está presente, casi sin darnos cuenta, en todo lo que hacemos”. Así lo piensa Luis Lapuente, periodista musical que plasma en “El muelle de la bahía” (Ediciones EFE EME)
De todo ello hemos hablado con Lapuente, que presenta un libro que sin pretender ser una biblia de la música negra, lo es, porque repasa cada una de las vías de nacimiento del soul (Detroit, Memphis, Filadelfia, disqueras míticas como Motown o Stax, el nacimiento del funk y la música disco…) con una extensa selección de discos para no perderte lo mejor de una música que tuvo en Amy Winehouse una digna heredera hasta su pronta desaparición.
¿Cuál es a tu entender el póker de ases del soul?
Mmmm, déjame pensar. Sam Cooke, Otis Redding, James Brown, The Temptations. Si añadimos a Curtis Mayfield, tenemos el repóker.
¿Cómo de importante es para la socialización de esta música la figura del creador de la Motown, Barry Gordy?
En Motown se dio forma a la idea de una música negra joven capaz de competir con el pop blanco de los años 60. Y esa idea fructificó en una de las mayores constelaciones de talentos de la historia del soul. Motown, obra del visionario Berry Gordy, fue el equivalente a The Beatles en Norteamérica.
Sam Cooke es el padre y Aretha Franklin es la madre del soul, quiénes son sus nietos, 60 años después…
Amy Winehouse ha sido el mayor talento surgido en las entrañas del soul contemporáneo. Tras su muerte, quedan artistas menos deslumbrantes, pero con muy buenas maneras: Sharon Jones, Erykah Badu, Curtis Harding… O un blanquito británico fantástico: James Hunter.
Si puedes, ¿elige tres canciones que definan la historia del soul?
“Reach Out I’ll Be There”, de los Four Tops, una de las cimas del universo Motown, pura efervescencia rítmica y emocional y un cantante majestuoso, el gran Levi Stubbs. “A Change Is Gonna Come”, de Sam Cooke, que anticipó el alma y la carne del soul poco antes de la muerte de su autor. “Respect”, de Otis Redding, soul sureño de la mejor escuela, un himno en la lucha por los derechos civiles del pueblo negro norteamericano.
En el soul se da, quizá de manera más clara que en otros estilos, el one hit wonder. Descubre a la gente algunos de esos temazos desconocidos.
Hay muchos. Algunas de las piezas menos conocidos aquí: “Too Late To Turn Back Now” (Cornelius Brothers & Sister Rose), “You Better Move On” (Arthur Alexander), “You’ll Lose A Good Thing” (Barbara Lynn), “Just One Look” (Doris Troy), “Cool Jerk” (The Capitols), “Open The Door To Your Heart” (Darrell Banks) o, ya en España, la incandescente “Bocaccio Soul” (Augusto Algueró).
¿Qué opinión te merece el revival soulero ligado a la escena Northern Soul?
El soul siempre vuelve porque es la música más sincera y arrebatadora de la historia del pop. La escena Northern soul rescata los temas más oscuros, pero también descubre a auténticos maestros del género, y siempre es bienvenida. De todos modos, el soul está presente, casi sin darnos cuenta, en todo lo que hacemos: hay soul en los anuncios de televisión, en la banda sonora de cualquier película, en los temas de los raperos que se apropian de las viejas grandes melodías… el soul está siempre presente en nuestras vidas.
En España, aunque la gente no lo sepa, ha habido varios grupos que han apostado por el soul desde los sesenta. ¿Cuáles han sido para ti los más destacados?
En el libro casi se responde directamente a esta pregunta. En los años sesenta, Los Canarios, Los Bravos, Los Pop Tops y Lone Star, cuatro bandas que contaban con excepcionales vocalistas, y que le ganaron por la mano a casi todos los demás, por profundidad, calidad y extensión de un repertorio propio enraizado en el soul. Luego, siempre ha estado por ahí Pedro Ruy-Blas en solitario o con Dolores, mezclando soul y jazz en discos legendarios. Más tarde, los sucesivos proyectos de Miguel Ángel Julián (Cool Jerks, Soul Tellers), el trabajado fake de Edwin Moses, lleno de devoción por el soul clásico, y quizás algunos grupos más recientes, como los Sweet Vandals.