Miriam: «Si Pilar está así de gorda es por tragarse todo el veneno que tiene»
Como era previsible, la visita de Laura y Miriam ha tenido infinidad de consecuencias en la casa. Anoche supieron que Dani y Carlos salen a la palestra al subir tras salvar las chicas a Yangyang y no tienen duda alguna de que la expulsión está entre aquellos dos. En condiciones normales tendrían muchas dudas. Al ir conociendo porcentajes van un poco más orientados. Pero las toneladas de información que han introducido Laura y Miriam les hace conocedores de muchas claves. Por ejemplo, que Dani y Carlos se equivocaron abordando el tema de Laura. Ella es la primera que lo llama “mi tema”, y para no habérselo contado ni siquiera a su novio durante cinco años parece poco incómoda en hacer protagonista a su tema puesto que lleva hablando de ello desde que entró.
Esta misma madrugada respondía displicente al muy razonable y bien razonado comentario de Mina sobre lo sorprendente que resulta esa ocultación del tema a su novio. En definitiva, supone mentir de forma continuada y concretamente en muchas ocasiones, argumenta Mina. Y habla de cosas como el álbum de fotos de la infancia u otras. Laura respondía entonces a lo de mentir con un lacónico: “No tiene por qué”, y ponía cara de póker. Imposible que se estuviera sintiendo incómoda cuando lleva días convirtiendo su tema en un monotema. Y lo ha hecho sin criterio, haciendo razonamientos imposibles al tiempo que contradictorios. Reclamar que le hubieran preguntado a ella por su tema es tan cínico como absurdo.
Laura, al igual que Miriam, volvió a la casa supuestamente para que muchos pagaran sus culpas, pero parece que solo le interesa dejar mal a Dani y Pilar. Con respecto a los demás más bien les ha estado poniendo una cómoda alfombra para que laven su propia imagen y salgan ilesos de este trance. No en vano se la ha estado viendo de buen rollo, bromeando con Carlos. ¿Acaso fue mejor la actitud de este? No lo creo. Se lo decía anoche Hugo, con su extraordinaria capacidad para analizar todo con acierto. Hubiera bastado con hacerles el reproche y ya está. Y ni siquiera eso, porque es una forma de dejarles quedar bien y que purguen sus culpas.
En algún aspecto son parecidos Hugo y Laura porque los dos hacen mejores a quienes están con ellos. La diferencia es que Hugo lo hace porque les contagia su luz y su brillo de forma generosa, mientras que en el caso de Laura es por contraste. Carlos o Pilar frente a Laura mejoran enormemente porque esta les supera en tósigo y mala intención. Con Miriam pasa algo parecido, aunque tal vez menos. Ayer tuvieron estas dos amigas una charla en el dormitorio en la que se retrataron con claridad meridiana. Decía Miriam: “Si Pilar está así de gorda es por tragarse todo el veneno que tiene”. Laura asentía y lo corroboraba. Increíble que vayan de divinas, como si ellas no se hubieran equivocado nunca. Lo triste es que Pilar no tendrá ocasión de escuchar esto y pedir explicaciones, exigir una disculpa y humillarlas con crueldad. Es lo que están haciendo ellas.
Digo que no tendrá la ocasión Pilar, aunque podría ser que sí. Una vez contaminada la casa con la información de fuera que han llevado Laura y Miriam bien podría darse la oportunidad a los ofendidos por estas. Bastaría con que vieran las imágenes de ofensas como esa hacia Pilar. Podría dejarse a elección de cada concursante si quiere verlo y así dejar de estar en inferioridad de condiciones. Laura ha hecho que fueran pasando por su diván, diría más bien potro de tortura, a todos aquellos con los que tenía cuentas pendientes. Solo le faltaba Pilar, con quien habló ayer mismo. Con todos se ha regodeado sacándoles cualquier cosa en lo que se hayan podido equivocar. Incluso atribuyendo a unos cosas dichas por otros, como cuando hace que Carlos acepte como suyo (y se excuse por ello) el comentario de “¿cómo estará el temario por ahí abajo?”, hecho por Gabaldón. Pido que se les ofrezca la oportunidad de tomarse la revancha.
Lástima que no haya sabido nadie darle una respuesta adecuada a Laura. Deberían haber dicho algo así: “No estamos en igualdad de condiciones porque yo soy concursante y tú no. Además, tienes una información de fuera a la que yo no he tenido acceso, de nuevo es desigual nuestra situación. Por tanto, creo que lo mejor es terminar esta conversación. Si quieres lo hablamos cuando salga”. Esta habría sido una respuesta merecida. Hugo le decía a Laura medio en broma: “Eres patética”. Antes había afirmado, también en tono de coña: “Que liante eres, Laura”. Y ya sabemos que las bromas portan agua, como dicen los catalanes.
La inquina de Laura hacia Dani hace que resuelva mis dudas sobre si debe ser el expulsado o mejor sacar de la casa a Carlos. Me vuelvo a decantar por esta opción. Expulsar a Dani sería proporcionar un triunfo a Laura que no merece. Frente a frente me parece que los dos nominados son mejores personas que ella. Por eso deseo que Laura no se pueda colgar tal medalla. Y eso que Carlos ha sabido rectificar, se ha disculpado e incluso ha asumido que saldrá en cuanto esté nominado. Ayer pensaba que su porcentaje estaría cercano al 90 % una vez supo que estaba nominado. El sábado le explicaba Carlos a Rubén la razón de su tensa conversación con Laura, sin querer contarle “el tema”. Para ello recurrió a una metáfora que resulta un tanto disparatada. “Imagina que en tu casa tienes animales en peligro de extinción”, le decía. Reconozco que me hizo reír y me ganó un poco con esto.
Carlos estaba dispuesto a cualquier cosa para explicarle a Rubén que “el tema” era algo de Laura conocido por muchos en la casa sobre lo que han hecho comentarios inadecuados. Rubén, muy perdido, llegó a pensar que se trataba de una violación sufrida por la concursante, o eso entendí cuando preguntaba por lo de la “v”. Eso explicaría aquello que le dijo Hugo y escuchó en la despedida de Miriam sobre una historia de vida complicada y dolorosa. Me llegó a dar pena Rubén y su ignorancia. Hugo habló después con Rubén y tampoco quiso contárselo. La diferencia es que Carlos le dijo que no se lo diría “por su bien” mientras que Hugo lo explicaba de forma impecable: “No tiene importancia, es un tema súper normalito, pero uno decide si quiere contarlo o no”. Rubén quería saber si Hugo lo había intuido o se lo habían contado. “Si me lo hubieran contado te lo habría dicho, boludo”, le respondió. El único que ha tratado bien el tema de Laura ha sido Hugo.
Anoche hemos sabido que en esta edición no habrá repesca sino intercambio. Pero no se trata de esa habitual salida a otro país de un concursante sino de una posibilidad de intercambio real entre las dos visitantes y los que siguen en el concurso. La audiencia decide si se quedan en la casa Miriam y Laura, lo hace solo una de las dos o ninguna. Las opciones son cuatro: se queda Miriam, se queda Laura, se quedan las dos y no se queda ninguna. Esta votación está abierta de forma gratuita en esta web y en la App del programa hasta el martes en el Última hora con Sandra Barneda. Si la decisión es que se quede alguna de ellas, o las dos, la siguiente fase será elegir el concursante que abandona el concurso y deja su hueco a la que regresa para quedarse.
La opción personal de este gato opinador es que no merece quedarse ninguna, aunque posiblemente Miriam daría más vida al concurso que concursantes como Cristian o Miguel. Las haría desfilar hacia el camino de salida a las dos, no sin antes darles la oportunidad a los que se quedan en la casa de ver las lindezas que ellas han dicho de ellos. No sé si de todos, aunque si hurgamos en el archivo seguramente sí. A Hugo le llamaron “baboso”, por ejemplo. Eso sí, fue antes de saber que era el favorito de muchos por merecimiento propio. En todo caso, me contento con que no se quede Laura, de quien hasta su regreso a la casa pensaba que era una concursante pésima y ahora opino que es veneno puro.
En esto también estoy con Hugo cuando dice: “Estoy poniendo la escoba detrás de la puerta, como se hace en Uruguay, para que se vayan los invitados, pero no está surgiendo efecto”. Este jueves sabremos si se queda alguna de las visitantes y, por tanto, sale más de un concursante. El ritmo de salidas está siendo alto, y no solo por la mecánica del juego. En este caso se justifica porque esta edición comenzó con más concursantes que en las últimas, y posiblemente más que nunca. Lamentablemente, las salidas del sábado no estaban previstas. El giro de guion que ha supuesto la expulsión disciplinaria de José María y, de momento, la salida de Carlota, ha sido algo inesperado. El comunicado oficial a este respecto dice así:
«La dirección de ‘Gran Hermano’ ha decidido expulsar del programa a José María por lo que considera una conducta intolerable. Asimismo, ha considerado oportuno que Carlota deje la casa.
Puntualizar que el único expulsado es José María. En cuanto a Carlota, siguiendo las directrices del equipo de psicólogos, se le ha aconsejado que en estos momentos permanezca fuera de la casa. La puerta está abierta para ella, de manera que el jueves podría reincorporarse al concurso.»
No haré ningún tipo de conjetura porque me parecería absurdo y temerario. Tengo confianza absoluta en que Gran Hermano contará lo que pueda, si es que puede. La protección del concursante es siempre prioridad. Así ha sido durante los 17 años que lleva existiendo este programa, camino de 18. Me niego a compartir la desconfianza por todo, de forma injusta e inmerecida en este caso. Si el programa decide que el expulsado salga en una gala se dice que lo hacen por la audiencia, si no se espera también es por la audiencia. Aparte de que es lícito y lógico que una empresa de televisión privada haga las cosas pensando en la audiencia, en este caso no se sostiene la crítica contradictoria a una cosa y a la contraria. Y así es con casi todo.
Lamento siempre que un concursante tenga que salir expulsado por decisión de la dirección de Gran Hermano. Que en este caso haya otra concursante recibiendo ayuda de los psicólogos hace que lo lamente todavía más. Este tipo de decisiones nunca son fáciles. El sábado los concursantes hacían la maleta del expulsado sorprendidos por el inesperado desenlace. Luego el ‘súper’ les ha pedido que dejen de hacer conjeturas, y es eso mismo lo que decidí hacer desde el primer momento. El jueves sabremos más, al menos respecto a si se produce o no la reincorporación de Carlota.
Cambiando de tema, las circunstancias dadas de Yangyang me importan igual de poco que las del resto de concursantes. Lo comenté en su momento de Laura y lo repito ahora. De Yangyang solo puedo juzgar lo que veo en la casa, que está dando la paliza todo el día más allá de lo humanamente soportable. También que estoy completamente de acuerdo con lo que le estuvieron el otro día comentando Rubén y Miguel sobre sus mentiras. Tiene razón Rubén cuando observa la incoherencia de que la china decida dejar a su novio en el ‘confe’ después de haber afirmado que no vería el programa en ningún caso. Postureo total. Desde su llanto ante la expulsión de Juan hasta su acercamiento a Hugo. Todo en ella suena a impostura y falsificación.
Parecidos razonables
Traigo parecido entre Gabaldón y el actor Iván Massagué, uno de los protagonistas de la serie ‘Gym Tony’. Hasta en la voz tienen parecido.
Moleskine del gato
Los porcentajes ciegos estaban así durante el Debate de anoche: 44,1 %, 43,0 %, 9,1 % y 3,8 %.
Esta última ha sido una de esas típicas madrugadas de bromas en Gran Hermano. La casa se convirtió en un colegio mayor o un campamento de verano, con bromas de todo tipo, casi ninguna demasiado pesada. No me parece mal, es mejor ver cómo hacen esto que otras cosas, siempre y cuando no se repita cada noche, lo cual termina siendo muy cansino. Lo entiendo como vía de escape a un fin de semana intenso y lleno de tensión. La madrugada del viernes con la discusión entre Carlos y Miriam porque esta había provocado a propósito un fallo de prueba. La del sábado con todas las tramas abiertas y Laura logrando que empatizase con todos (menos ella) como nunca antes había hecho.
No estaría mal que el 'súper' les exigiera que sacasen toda la comida que tienen escondida. Siempre recuerdo algunas ocasiones en que esto ha pasado (en Gran Hermano 7, por ejemplo) y lo mucho que lo hemos flipado. Mi mayor duda es quién está gestionando todo lo que escondía José María.
Cuando Mina dice de Aly que "tiene rodaje y vino a lo que vino" todos sabemos lo que quiere decir. Y a mí personalmente me parece repugnante.
Me preguntan algunos lectores por qué me parece que Hugo marca una distancia enorme por encima del resto de concursantes si se trata de un concursante bastante pasivo durante parte del día. Respondo que Hugo es jugador de baloncesto y eso determina mucho su forma de actuar. Durante buena parte del tiempo permanece sentado en el banquillo, viendo la jugada desde fuera. Y cuando sale a la cancha es el que más puntos mete, destacando por encima de los demás. Muchos de esos puntos son triples certeros, que entran acariciando con suavidad el aro. Ignoro si era bueno como jugador de baloncesto. Como concursante de Gran Hermano es Magic Johnson, Sam Jones y Michael Jordan a la vez.