Según Jonan, Asraf planeaba poner nerviosos a algunos compañeros

Dice Jonan: “Hemos hablado muchas cosas porque nos hemos tirado (él y Asraf) hasta cuatro horas despiertos, sobre todo en playa Pelícano. Él sabe, por ejemplo, que su presencia ha incomodado durante el mes que estuvimos en Pelícano a Ginés, a Diego y tal, entonces ha estado en situaciones metido con ellos en las que él (Asraf) por la noche comentaba otra vez: ‘mañana voy a ir y les va a poner nerviosos mi presencia’”. Asraf lo niega categóricamente y acusa a Jonan de estar inventando. Salió el gordo y, en esta ocasión, fue Jonan quien hizo de niño de San Ildefonso. De manera que Asraf planeaba de madrugada poner nerviosos a algunos compañeros con su sola presencia en la mañana siguiente. Es un bombazo.

También es verdad que hay que estar muy ciego para no haberse dado cuenta de eso que cuenta Jonan desde hace algo menos de tres meses. Y sin haber estado presente en la conversación. Eso hace creíbles las palabras de Jonan, que se autoinmola con esta confesión, protegiendo a Adara y Alma porque evita implicarlas o pedir confirmación de su parte sobre lo que acaba de revelar. ¿Por qué considero mártir a Jonan? Es muy simple: ser conocedor de los planes de Asraf le convierte en cómplice. Está hablando de un momento en que Asraf, Adara y Jonan estaban muy unidos. Por tanto, cualquier acción planeada en conjunto implica a todos. Aunque Jonan quiera salvar a su amiga, y considerando que podía dormir cuando Asraf le hacía esa confesión, es imposible de creer que no fuera informada del plan a la mañana siguiente.

Tengo dicho que Asraf y Adara son tal para cual, pero ahora tengo que abrir el foco y añadir a Jonan, cuando menos. Dejo fuera a Alma, entre otras cosas porque ella siempre vio ese tipo de miserias y las denunció. No como Jonan y Adara, que permanecieron en silencio. Ahora habla Jonan ante la insistencia de que entraran en detalles y no se volvieran a quedar en las vaguedades, las generalizaciones y las historias siempre repetidas de los cangrejos y las botas que le recomendó ponerse. Anoche no salimos del bucle, pero se contaron otra cosas, por lo menos.

Jonan cuenta ahora algo que sabe desde hace semanas y de lo que lleva todo ese tiempo siendo cómplice. Ve que el barco se hunde y quiere abandonarlo a toda prisa, como hacen las ratas. Él y Alma le están haciendo el juego sucio a Adara, mientras esta calla y asiente. No es casual que ambos se mostrasen renuentes a hablar, cosa que hicieron casi forzados por la situación. No me extraña, porque son conscientes de que aplaudieron y jalearon la actitud del provocador confeso Asraf. Ahora le dejan solo, renegando de algo en lo que fueron partícipes. Y todo por una única razón, avalar a Adara en su claro esquinazo a Asraf. Recuerdo un viaje de fin de curso en el que se unía al grupo en el que yo iba una compañía no deseaba y le íbamos dando esquinazo, literalmente, para quitárnoslo de encima. Adara pretende esto mismo.

El intento de reconciliación fue promovido por Jonan, como confesó anoche. Tal vez pensaron que se estaban pasando y merecía la pena llevarse bien con él de aquí hasta el final. Lo debían considerar amortizado, fruta madura que pronto caerá del árbol, por lo que mejor mirar a otro lado y confiar en que no se notase la maniobra. Pero ninguno de los dos fue capaz de contemporizar en la hoguera de la sinceridad. Y aquí los tienes, Jonan y Alma dando las explicaciones que Adara no ha podido o no ha querido dar.

Se explica solo que Jonan y Alma montasen tanto drama anoche cuando descubrieron que Raquel no había emprendido viaje de regreso y ella o Artur volverían esa misma noche al concurso. Considerando a Asraf fuera de juego, solo les quedaba cargarse a Bosco. El camino hasta la final del trío estaba más que asegurado. La prepotencia de Jonan le hacía pintar un camino enmoquetado y cubierto de pétalos de rosa desde Honduras hasta Fuencarral, con la interrupción del desplazamiento en helicóptero. Pero todavía tendrán que encontrarse algunas piedras en un camino que no es de rosas, precisamente.

Han demostrado ser muy torpes no valorando que Asraf era aquel que logró hacerse molesto con su sola presencia. El que da la imagen de trabajador incansable, tiene al jefe loco pidiéndole un trato de favor por ser tan currante e intenta por todos los medios dejar mal a los demás para destacar él. Y sus medios son conocidos, con meter un poquito el dedito en el ojo basta. Conociéndolo tan bien han sido incapaces de valorar las consecuencias de delatarlo. No solo quedar en evidencia ellos mismos como cómplices, también ser sus siguientes víctimas. De momento, ya han llegado a la fase de que les moleste su presencia, lo cual demostraron la otra noche Adara y Jonan marchándose de su lado para dormir junto a Alma.

No estoy negando que vayan a llegar a la final, pero les va a salir menos barato de lo que pensaban. La vuelta de Artur, que ganó a Raquel en el voto express, se une al escollo de un Asraf que no está tan muerto como pensaban, aunque en las galas se defiende lo mínimo de las acusaciones, interrumpiendo para callar y haciendo pucheritos con voz trémula cuando le dan la palabra. Jonan y Alma estaban profundamente disgustados porque volviera uno de los dos últimos expulsados. Y ni siquiera parecía hacerles entrar en razones la explicación obvia de que ante el abandono forzoso de Manuel se hacía necesario hacer algo para que el programa termine cuando estaba previsto. De igual forma que cuando fue expulsada disciplinariamente Yaiza se suspendió la expulsión de la semana. Estuvo de más el numerito de Alma queriendo abandonar tras su fracaso en la prueba de líder.

El martes iban a quedar dos finalistas para la prueba de líder, pero Bosco, Alma y Asraf lo dieron todo, logrando llegar los tres. Alma era eliminada anoche la primera, tras escurrirse y perder la verticalidad en un cambio de posición de los pies. Luego Bosco quería subir los sacos con la mitad de su peso que sujetaban con las manos y se fue para atrás en una caída bastante cómica. Por tanto, Asraf es el líder. Esto dio al traste con las intenciones nominatorias de Alma y Jonan. Este último lo llegó a verbalizar cuando daba su voto al renacido Artur. Me urge que en una futura nominación, a ser posible en la próxima, se enfrenten Jonan y Asraf, salvándose este último en martes. Empezarían a tener miedito.

Las nominaciones discurrieron así:

Artur > Alma

Adara > Artur

Alma > Artur

Jonan > Artur

Bosco > Jonan

Los nominados del grupo son Artur, Alma (a quien el lastre de Artur le había otorgado un punto de nominación) y Jonan. A Asraf, como líder, solamente le quedan Adara y Bosco para dar su nominación directa y elige a Bosco. Por tanto, nominados: Alma, Artur, Bosco y Jonan.

Asraf evita nominar a Adara para no socavar su papel de santo siempre bienintencionado. Le resta credibilidad tanto esfuerzo por conseguir que la audiencia considere necesaria su canonización. Desconfía de aquel que no admite ni un rasgo de maldad y niega cualidades comunes para todos, en mayor o menor medida, como la avaricia o la envidia. Nada más fácil para pillar a un mentiroso que escucharle decir: “Yo nunca miento”. Después de todo lo sucedido, Asraf tendría que haber nominado a Adara, aunque considerase inútil hacerlo porque se salvaría con toda certeza el martes.

Artur nominó a Alma, a quien le había dado el lastre, como dije antes. Es curiosa la insistencia en nominar a la familia Cortés Bollo. Se le atravesó Manu y tampoco puede ver a su hermana. Ese lastre y la nominación posterior se puede considerar que son herencias de Manuel, porque uno hereda el patrimonio, pero también las deudas.

En el Moleskine del gato hoy me detengo a observar gestos de varios concursantes en la gala de anoche. Y hoy tenemos bonus track en los momentazos.