Noemí Ungría se dio a conocer en la tercera edición de Gran Hermano y, aunque fue la primera expulsada del programa, su repercusión mediática estuvo en alza durante muchos años.
Fue colaboradora de distintos programas de televisión pero, sin duda alguna, su relación con Raquel Morillas generó su punto álgido atrayendo la atracción de los medios. Un trágico accidente les cambió la vida y, más tarde, tras pasar por un matrimonio entonces no legalizado, pasaron del profundo amor a un odio visceral.
A pesar de todo, volvieron a formar pareja televisiva mediante “Gh, el Reencuentro” pero, en su caso, el reality desencadenó un punto y final en su relación que ha terminado en los tribunales.
Tras sus sonadas relaciones sentimentales y continuas polémicas en los platós, hoy comparto con todos vosotros la entrevista que he realizado a Noemí Ungría para la revista Qué Me Dices! demostrándonos que, a pesar de que su vida haya cambiado radicalmente y que ahora se encuentre felizmente casada y sea madre de dos niños, sigue teniendo mucha tela que cortar, dejándonos titulares como:
“A Chelo le interesaba tenernos a Raquel y a mí cerca, a nivel laboral le iba estupendamente”
“La mala relación que Raquel hizo ver que teníamos en Gh, el Reencuentro, fue todo un paripé. Teníamos una relación estupenda”
“A Raquel le superó tanto no ganar el dinero esperado que me agredió, me arrastró de los pelos y me dijo que me iba a matar”
“Sofía Cristo estaba muy pillada por mí y mantuvimos una relación de varios meses”
“Lydia Lozano y yo no nos soportamos”
Noemí, hace poco volvíamos a saber de ti tras la visita a Sálvame Diario de David Vilardell, ¿te han afectado sus palabras?
Me alegro de que esté bien, lo veo muy con él quería estar… Pero me duele que salga diciendo chorradas como que él era quien me había mantenido ¡No me podía creer que tuviera tanto morro!
Te creó un perfil de mujer mentirosa e interesada…
Kiko, ¡ese perfil es tan típico! He estado tan acostumbrada siempre a oír lo mismo que tampoco me afecta, y menos a estas alturas.
Al gastar una broma a Chelo haciéndole creer que habías hablado mal de ella, rápidamente saltó en tu contra asegurando que si contara de ti, tendrías que irte del país, ¿tienes miedo a algo que pueda desvelar?
Para nada. Dudo que tenga nada que decir sobre mí, pero puede hablar lo que quiera. Por respeto a su pareja no diré nada que sea para hacerle daño, pero reconozco que me sorprendió su amenaza.
Chelo fue tu amiga cuando eras pareja de Raquel Morillas, ¿cómo os conocisteis?
El primer contacto fue por tema laboral, vino a hacernos una entrevista al hospital en el que estábamos Raquel y yo cuando tuvimos el accidente de coche.
Estábamos muy metidas en la televisión y teníamos a la prensa detrás de nosotras. Supongo que en ese momento le interesó tenernos cerca porque a ella a nivel laboral le iba estupendamente tener contacto con nosotras. Fue la que hizo nuestra boda y todo el tema de nuestro romance.
¿Su amistad era sincera o tenía tintes de interés mediático?
Yo creo que un poco las dos cosas. Le interesábamos por quienes éramos y luego surgió el buen rollo. Así que la cosa empezó por temas laborales y terminó en amistad, pero sobre todo con la pareja de Chelo, y claro, ella iba metida en el pack.
¿Qué pasó para que vuestra amistad se rompiera?
Tanto a Chelo como a su mujer las consideraba amigas mías, y ellas se posicionaron a favor de Raquel. La acogieron en su casa y creyeron todo lo que Raquel les decía.
En ese momento, ¿qué fue lo que más te decepcionó de Chelo?
Que no me dieran opción, me sentí traicionada. Me hubiera gustado que por lo menos me hubieran preguntado qué había pasado. Pero bueno, Raquel siempre ha sido la buena y la pobrecita, y yo la mala y la fuerte.
Junto a Raquel Morillas sufriste un brutal accidente que sin duda marcó un antes y un después en tu vida, ¿cómo lo recuerdas?
No recuerdo nada del accidente, esa parte del cerebro que tengo bloqueada. Mientras que yo sólo me di un golpe en la cabeza, ella tuvo la mala pata de que físicamente quedó tocada.
¿Cuál fue la peor consecuencia a nivel físico de ese accidente para ti?
El golpe en la cabeza me dejó más para allá que para acá, hacía cosas incoherentes. Mi madre estaba preocupada de que me quedara así.
¿Y a nivel psicológico?
El sentirte culpable de un accidente y que te hagan sentirte responsable porque eres la que conduces, es bastante jodido. Estuve en psicólogos y psiquiatras porque yo estaba súper tocada con ese tema. Tardé en asimilar que yo no había hecho nada, que fue un desafortunado accidente.
¿A partir de ese momento tu imagen se distorsionó a mayor aumento?
Totalmente. Ya que la otra persona estaba muy afectada físicamente, nadie se paraba a pensar en lo que me había pasado a mí. En ese sentido, está claro que yo tenía las que perder. Pero bueno, te acostumbras y lo sobrellevas, aunque fue muy difícil tirar para adelante y superarlo.
¿Lo tienes ya superado?
Hace muy poco tuvimos que desplazamos hacia el hospital en el que Raquel y yo estuvimos ingresadas, pero no pude llegar. Me entró un ataque de pánico entrando en el parking, y mi marido tuvo que dar la vuelta con el coche porque yo no podía respirar, todo lo que hacía era llorar sin parar.
No sabía que iba a reaccionar así, pero es algo que tengo todavía ahí y que creo que nunca olvidaré en la vida. Incluso hablarlo me duele.
Después de vuestra ruptura decidisteis entrar a “Gh, el Reencuentro”.
Sí, llamándose “el reencuentro” era de lógica que allí me encontraría a Raquel. Yo fui con mucha ilusión, incluso me metí en la casa estando en un tratamiento para quedarme embarazada y siendo esos días mis días fértiles. ¡Llegué a pedir a la producción del programa si podía entrar mi marido para rematar el proceso! Pero claro, me dijeron que estaba flipando…
Vuestras discusiones dentro de la casa fueron muy sonadas, ¿antes del programa nunca intentasteis un acercamiento?
Kiko, cuando Raquel y yo entramos de nuevo en la casa, nuestra relación era buena. Nos íbamos de copas con mis amigas, estuvo en mi casa conociendo a mi marido…Teníamos una relación estupenda.
Pero, entonces, ¿todo lo que vimos dentro de la casa fue un paripé?
Sí, fue entrar en “El Reencuentro” y como si de repente me odiara otra vez. Yo no me lo podía creer.
¿Por qué Raquel modificó su comportamiento contigo delante de las cámaras?
¡Porque Raquel quería ganar y va siempre a por la puñetera pasta! Pero lo que ella no sabía es que el concurso consistía en llevarse bien. Por eso nos echaron, porque fuimos lo peor, y ella no paró de machacarme y de tratarme como a una mierda. Y eso, la superó.
La superó tanto que incluso las cosas terminaron peor de lo previsto, ¿no?
Sí, ella no cobró el dinero que tenía pensado y le dio tanta rabia que, el día que teníamos la primera gala, me arrastró de los pelos nada más abrirse la furgoneta de producción. El chófer se quedó flipando viendo cómo la otra me arrastraba mientras me gritaba que me iba a matar.
¿Qué hiciste al respecto?
No pude ir a ninguna gala y denuncié a Raquel. Ella intentó mediante su representante y mediante la pareja de Chelo que le quitara la denuncia.
¿Cuándo se celebrará el juicio?
El 22 de Noviembre en Madrid.
¿Qué pides a Raquel en la demanda?
Yo no le pedía dinero, sólo el reconocimiento de que me pegó y me intentó machacar física y verbalmente. Pero mi abogada pide todas las galas a las que yo no pude ir y que no cobré por su culpa.
¿Qué esperas de ese juicio?
Ganar y, sobre todo, callar bocas, porque hubo más de uno que dijo en televisión que yo me merecía más de una hostia. Lequio se pasó muchísimo.
¿No te da pena haber terminado así después de todo?
Cuando vi su cara y su manera de querer agredirme dejó de importarme a pesar de lo mucho que he querido a esta persona. Así acabó mi historia con Raquel de aquí a la eternidad.
¿Te arrepientes en algún momento de vuestro pasado juntas?
Nunca, mi historia de amor con Raquel fue maravillosa en su momento. La quise muchísimo y estaba muy enamorada. Además, gracias a lo que viví en el pasado, tengo ahora esta vida.
Pasaste de tu relación con Raquel a estar con David Vilardell y terminar casándote con Enric Bayon, ¿qué supuso para ti esos cambios a nivel amoroso?
Pfff, fue terrible. En el momento en el que terminó mi relación con David, que era una persona con muchísimos problemas y una identidad que no era la suya, me pregunté ¿y ahora qué? ¿qué es lo que me gusta a mí? Tenía una empanada mental que no veas así que me fui a una psicóloga y me estuvo tratando.
¿Qué consejo te dio?
Que yo tenía que ser madre. Que me buscara un amigo para probar si podía mantenerme relaciones sexuales normales con hombres.
¿Eso fue lo que te lanzó a volver a probar suerte con los hombres?
Bueno, empecé a tener relaciones tanto con mujeres como con hombres. Estuve un año sola, divinamente, haciendo lo que no había hecho mi vida, guarreando.
Me imagino que habrás tenido más que palabras con personajes bastante conocidos…
Incluso estando en Enric he tenido oportunidades con personas que me ha dado una rabia… ¡Justo cuando estoy felizmente casada aparece una persona por la que he estado loca toda mi vida!
¿Profesión?
Cantante, español y muy conocido. Es una persona que me ha encantado siempre, ¡pero ahora no puedo hacer nada!
¿Y durante ese periodo sabático?
Bueno, he tenido mis cosas con mujeres famosas…
¿No estaremos hablando de los rumores que te relacionaron con Sofía Cristo?
Ella siempre lo ha negado… Luego se lio con Nagore y aluciné, porque nunca entendí el pudor que tenía. Iba de liberal y luego negaba a la mayor.
¿Fue cosa de una noche o algo continuado?
Ella estuvo viviendo unos días aquí en mi casa de Barcelona, estuvimos en el apartamento de una amiga… Tuvimos una relación de algunos meses. Pero no fue una relación estable sentimental porque yo no quise, pero ella estaba súper pillada por mí.
¿Por qué no estabas dispuesta a dar ese paso en vuestra relación?
No la veía como pareja, era muy joven y con unas inquietudes que quizás ya han salido… Estaba un poco perdida.
¿Te asombró que confesara sus adicciones?
No, yo se lo decía a ella. Que estaba muy bien querer experimentar pero que llevaba un ritmo que no era bueno. Veía que no iba bien encaminada.
Y finalmente, te casas con Enric Bayon y eres madre de dos niños…
Sí, teníamos una afinidad especial hasta que, sin darme cuenta, me enamoré de él, cumpliéndose así mi sueño, porque me parecía el hombre perfecto como padre de mis hijos. ¡El calvito es el amor de mi vida!
En cinco años casada hemos tenido dos hijos, Cloe que tiene 19 meses y Eric que hace tres años este mes.
Actualmente, ¿a qué te dedicas?
Me he centrado plenamente a mis hijos y ahora estoy en un proyecto muy chulo. Nos dedicamos mediante las redes sociales a hacer que famosos y empresas potencien su imagen.
¿Volverías a probar suerte en un reality?
Por supuesto. Acorralados me encantaría, a Supervivientes me iría de cabeza y, por supuesto, volvería a un Gran Hermano.
A pesar de las consecuencias de la fama, ¿haces balance positivo?
Absolutamente. Si yo en su momento hubiera sabido todo lo que sé ahora, otro gallo hubiera cantado.
En este tiempo alejada de la televisión, ¿ha cambiado tu modo de ver las cosas?
¡Y tanto! Ahora lo veo todo desde otra perspectiva. He dejado de hacer muchísimas cosas, televisivamente hablando, por no pasarlo mal ni hacérselo pasar a los demás. Pero ahora, me resbala, estoy dispuesta a contar toda la verdad.
¿Te verías formando parte de un programa como Sálvame?
Por supuesto, me encanta Sálvame. Lo malo es que os lleváis los problemas del plató a casa y, así sucede…
¿Con qué compañeros te llevarías bien?
Me llevo estupendamente con todos, piensa que hemos estado juntos en “A tu lado. Eso sí, la excepción es Lydia Lozano, no nos soportamos de nunca. Cuando nos vemos nos saludamos con su “hola, ¿qué tal?” pero es mentira todo, no nos aguantamos, nos caemos fatal y hemos discutido en público para tirarnos de los pelos.
¿Cómo sería estar de compañera de Chelo García Cortés?
No tendría ningún problema, me parece buena periodista aunque no le vaya nada trabajar en Sálvame. No todo el mundo sirve para mantener una discusión televisiva, no es fácil y creo que Chelo no está preparada para ello. A ella le va más otro rollo en un nivel mucho más light.
¿Qué te parece el regreso de Belén Esteban a la televisión?
Belén se ha excedido en tener demasiado protagonismo, el problema es que cuando te subes tanto a las nubes, cuando caes te pegas un porrazo que te puedes romper todos tus huesos. En mi opinión, se le subió demasiado a la cabeza, estaba como endiosada. Está claro que hablar tanto de su vida le ha rebotado.
Noemí, gracias por tus confesiones.
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