Los ciudadanos ucranianos piden que sus representantes políticos sean tan reales y auténticos como él. El respaldo de la población y su buena relación con los medios de comunicación lleva al docente a alzarse con la victoria electoral en las urnas y convertirse en el presidente de Ucrania.
En su nueva posición, llena de responsabilidades y presiones, Goloborodko mantiene intactos sus mensajes sobre la verdad y la honestidad y un pensamiento completamente opuesto al de sus predecesores en el cargo.
Tras conocer a todo el equipo que le rodea, mucho del cual no sabe ni para qué le puede servir, Vasyl Goloborodk se muestra preocupado por su país y no por otras cosas banales.
Ante la nueva visión del presidente, sus asesores se muestran preocupados: "Parece un santo. Va a ser muy complicado trabajar con él... Tenemos que hacer algo", advierte uno de ellos.
Sin embargo, el que debería ser la mano derecha Goloborodk confía en que sus buenas intenciones cambien al probar el poder: "Dejemos que se pegue la buena vida siendo presidente. Sé que cambiará porque hasta a la persona más honesta del mundo le gusta vivir a costa del estado", reflexiona.