In extremis, la Policía Nacional ha conseguido evitar que un joven de 27 años con una enfermedad psiquiátrica acabara con la vida de sus padres en el barrio madrileño de Chamartín. Inma Rivas se ha desplazado hasta el lugar de los hechos para darnos los detalles de un suceso que podría haber terminado en un nuevo parricidio.
En el quinto piso de un edificio del barrio madrileño de Chamartín, los gritos de terror de una madre daban la voz de alarma de lo que estaba sucediendo. Un joven de 27 años con problemas mentales y con un tratamiento pautado, sufría un brote inesperado de esquizofrenia e intentaba de repente asfixiar a su padre. La madre comenzaba a gritar y a intentar evitarlo. Al parecer, el joven se habría desplazado a la cocina para coger un cuchillo y el matrimonio habría aprovechado para esconderse en el dormitorio.
Al mismo tiempo que intentaban que el joven no entrara en la habitación, los gritos desesperados de la madre daban la voz de alarma y los vecinos llamaban a la policía. Las autoridades tardaban mucho en llegar y al hacerlo escuchaba la desesperación de una madre que ya no podía más “o entráis ya o nos va a matar”. Finalmente, la policía conseguía acceder al domicilio y el joven se abalanzaba sobre ellos.
El sucedo ha quedado en un susto y en lesiones leves. El joven ha sido ingresado en la Unidad de Psiquiatría del Hospital Universitario de La Paz. Según ha asegurado Vanesa Lozano, es un chaval que está controlado, medicado y que acude a sus revisiones, pero que de manera puntual sufre un brote y que depende por completo de sus padres. Los padres tenían todas las medidas necesarias para evitar algo así, pero hay veces que estas cosas no se pueden evitar.