Ana y Olivia siguen paradero desconocido y su búsqueda ha comenzado ya en el Océano Atlántico. Los cuerpos y fuerzas de seguridad trabajas sin descanso para encontrar a las niñas secuestradas por su padre en Tenerife, cuando se ha sabido que la obsesión de Tomás Gimeno sobre la nueva vida de su pareja llegó a tal extremo que le hizo contratar a un detective privado para conocer cada uno de sus movimientos.
Un barco con un sonar de barrido lateral llegará en las próximas horas a Tenerife dónde comenzará la búsqueda de las pequeñas Ana y Olivia en la inmensidad del Océano Atlántico. La agónica búsqueda de las pequeñas y su padre Tomás Gimeno continua activa y dentro de los avances de la investigación se ha sabido que Gimeno tenía tal obsesión por la nueva vida que había comenzado su exmujer que llegó a contratar a un detective privado para seguir cada uno de sus movimientos.
Es una de las líneas de investigación que se baraja, pero es una información que no está contrastada y están abiertas todo tipo de hipótesis. Cualquier detalle en la investigación puede determinar si Tomás ha seguido un plan analizado al detalle o su desaparición corresponde a un impulso.