La autopsia de Érika, la niña de 14 años asesinada en Oviedo, desvela que su asesino le atacó por la espalda y que la primera puñalada se la asestó en el cuello

La autopsia de Érika, la niña de 14 años asesinada en Oviedo, desvela que su asesino le atacó por la espalda y que la primera puñalada la asestó en el cuello