Desolador, doloroso y tristísimo es el testimonio de Victoria, una joven ucraniana que lleva siete días escondida bajo tierra y rodeada de bebés que viven con auténtico terror los bombardeos que Rusia está proyectando sobre la ciudad de Kiev. Victoria piede ayuda entre lágrimas.
“La situación está muy mal porque vivimos aquí siete días y cada vez que escuchamos un ruido no sabemos si vamos a vivir o no. Tenemos mucho miedo porque Rusia está haciendo todo lo posible para que no sean reales… Están utilizando bombas termobáricas y hacen todo lo posible para que la gente de Ucrania se quede sin luz, sin gas y sin agua… Da miedo salir a la calle porque disparan a la gente civil, les da igual que sean niños o gente mayor… Hace todo para matar a la gente de Ucrania”, así comenzaba Victoria, una joven ucraniana escondida en su propia ciudad a contarle a Sonsoles Ónega el drama que está viviendo su país.
Victoria lleva siete días escondida y relata llena de miedo lo que están sintiendo “En el búnker hay muchos niños, hay una niña que tiene dos semanas, otro niño que ayer fue su cumpleaños y tiene un añito, hay otros de tres y cuatro añitos… Los padres los dejan aquí para ir a su casa a por comida y ropa limpia, solo salen los que viven cerca del búnker. La mayoría lleva siete días sin salir y sin ducharse sin nada, parece un sueño de terror”.
Sin palabras y asegurando que es muy difícil vivir el sufrimiento que están viviendo. Los niños que le rodean son muy pequeños y no son conscientes de que lo que está sucediendo, pero asegura que los más mayores si lo son “Mi sobrino de nueve años pregunta cada día “Mañana seguiremos vivos o nos moriremos esta noche”. Una testimonio desolador que muestra cómo lo están viviendo los más pequeños.
Victoria está muy abrigada porque en el refugio en el que están hace mucho frío y tienen que llevar varias prendas puestas. Respecto al ruido de los bombardeos asegura que atronador y que le llena de miedo cada vez que se produce. Sonsoles Ónega la ha escuchado desolada y ha querido saber de dónde sacaban la fuerza para seguir luchando y Victoria se ha roto por completo “Mi esperanza es que tengo una familia muy grande, tengo siete hermanos y muchos sobrinos. Espero que esto se acabe… Por favor, pido ayuda a todo el mundo, es imposible lo que estamos viviendo aquí…”.
“No hay derecho”, ha asegurado la presentadora ante el dolorosísimo testimonio de una joven que no podía contener las lágrimas y pedía al mundo entero que les ayudaran.