El hijo de Isabel Pantoja habla de nuevo sin tapujos sobre lo mal que lo ha pasado en este último año y de lo importante que es Irene Rosales para él: “Cuando a mí me iba económicamente como un tiro, todo el mundo estaba ahí; pero, cuando las cosas empezaron a ponerse mal, es Irene la que ha estado a mi lado en los peores momentos de mi vida. Yo nunca podré agradecerle todo lo que ha hecho por mí. Espero ser el hombre perfecto para élla".
Con respecto a su recuperación – y aunque ya está mucho mejor – Kiko tiene que seguir manteniendo unas pautas: “Todavía no puedo ir solo a ningún sitio, tengo ir siempre acompañado”, ha confesado, y ha asegurado que ahora le llega un momento de felicidad: “Esto ha sido muy duro para mí y para los míos y ahora nos toca disfrutar de la vida”.
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