“Nadie esperaba que esta ola se adelantara tanto”, nos ha confesado Gracia García Bescos, médico de urgencias hospitalarias de Aragón, que esperaba esta ola para finales de agosto o principios de septiembre: “Nos ha cogido con los hospitales en verano que es una época que se utiliza para hacer obras y hay que dar vacaciones al personal que está muy cansado”.
García Bescos nos cuenta que están “expectantes” ante el rebrote de coronavirus porque cada vez tienen más pacientes asintomáticos que se detectan “porque ha aumentado mucho la realización de PCR”.
Entienden que hay que seguir trabajando y que el confinamiento “no tiene que ser la solución final” pero destaca que están “preocupados” porque el nivel de ingresos hospitalarios es “muy similar” a los que había la tercera o cuarta semana de marzo, fecha en la que estábamos confinados.