Sara es víctima de un tremendo caso de violencia machista. Mientras ella estaba durmiendo, su marido la atacó con un taladro e intentó perforarle la cabeza. Que su pelo se enredara en la máquina y la rápida actuación de un guardia civil en prácticas le salvaron la vida.
En ‘Ya es mediodía’ hemos podido hablar con la víctima, que se encuentra conmocionada y con el cuerpo lleno de claros signos de violencia. “Emocionalmente, estoy intentado pasar toda esta situación”, explicaba.
“Nunca imaginé que el no parar a tiempo un empujón podía llegar a estos extremos. Sentí que perdía la vida”, explicaba la mujer a nuestra compañera. “Para mí fue algo irreal, porque estaba dormida y aturdida por los golpes”, declaraba la víctima.
“Nunca había vivido algo de esa magnitud y menos sin una discusión previa. No me explico que pudo pasar por su cabeza. Doy tantas vueltas para intentar encontrar una explicación”, declaraba la mujer que estuvo a punto de perder la vida a manos de su marido.
“Yo sentía la herramienta en el rostro, sentía que me moría”, explica la víctima, que fue socorrida por un guardia civil en prácticas que se encontraba comiendo con su familia en las inmediaciones de su hogar: “Lo único que dije es que cuidaran a mi hijo porque sentía que me moría”, aclaraba.
Entre lágrimas y sollozos, Sara mandaba un importante mensaje: “Es un milagro que yo esté aquí y que podáis escuchar mi voz. Tengo que decir que no dejéis pasar cosas así. El hecho de que alguien te dé una bofetada o te rompa el móvil no lo dejen pasar”, aseguraba.
“Eso pudo acabar con mi vida y dejar solo a mi hijo. Yo soy madre y padre para él, no me imagino haber dejado a mi hijo desamparado por no haber tomado precauciones”, explicaba la mujer.