Insectos en los fregaderos, ollas sucias, falta de ventilación, sin licencias… Estás son solo algunas de las condiciones que definen al comedor ilegal que se esconde en el sótano de la Jefatura de Unidad de Intervención Policial que ha denunciado The Objective. Un comedor ilegal que tenía a los mandos a 7 cocineros antidisturbios acusados de robar dinero de la caja.

Según informa el medio digital, el sótano de la U.I.P. esconde un comedor ilegal que daría cada día comida a unos 200 agentes a un precio de 5,5€ y que sería gestionado por cuatro cocinero antidisturbios que en este momento habría sido retirados del cargo tras ser acusados de sustraer 3.000€ de la caja.

Al parecer, la labor de dichos agentes era organizar los alimentos y servir a los agentes de su departamento y de otros instalados en la Jefatura Provincial de Moratalaz. Eso sí, los mandos no participarían de este servicio y cuentan con una zona de hornillos en la primera planta del edificio para realizarse su propia comida.

Un espacio que no cuenta con ninguna medida de seguridad, no tiene ninguna ventilación y según los propios agentes no cumple con los requisitos de seguridad y sanidad requeridos. Enrique Recio, periodista de The Objective, nos ha contado que los agentes cocineros han sido retirados de su puesto y que se les ha abierto una investigación porque de la recaudación ha desaparecido 3.000€.

El periodista también ha explicado que la cocina lleva existiendo desde 1989 y siempre han existido antidisturbios trabajando en el sótano de cocineros. Además, explica que cuando vienen agentes de otros destinos para operaciones especiales llegan a dar hasta 800 comidas “No tienen ninguna licencia de actividad, no tienen ningún control sanitario, los antidisturbios no tienen los cursos de manipulación de alimentos…”.

Inma Rivas, desde la Jefatura de Moratalaz, dónde no huele a comida desde fuera y parece que ninguno agente de U.I.P. quiere hablar del asunto. Agentes de otros departamentos aseguran que se trata de un comedor como si fuera el comedor de un colegio y que se utiliza solo en ocasiones puntuales, por lo que el dinero recaudado se destinaría a que siempre haya comida que ofrecer.

Aseguran que es una especial de venganza de los agentes a los que se le ha abierto una investigación por haber metido la mano en la caja. Luis Rendueles ha explicado que sería también una queja de los propios agentes “No puedes traer 500 antidisturbios a Madrid para la Copa Libertadores y darles una dieta de 15€ para que coman y cenen”.