Tamara Falcó no se casa, a punto de celebrar sus dos años de amor con Íñigo Onieva, la marquesa de Griñón ha desmentido la información que aseguraba que ya había comenzado a planear su boda y ha mostrado su enfado ante los medios que aseguraban que estaba embarazada “Es un poco insultante”.
Durante su último evento, Tamara Falcó ha asegurado que ella no recordaba que nadie le hubiera pedido la mano “Tendría que preguntar a Íñigo cuándo ha sucedido exactamente” y ha dejado claro que no está entre sus planes pasar por el altar “la periodista parecía tener muchos datos, yo tuve que apagar el teléfono”.
Además, se ha mostrado molesta con la información que aseguraba que podía estar esperando su primer hijo “Eso ya es un poco insultante, no sé cómo tomármelo”. Tamara nunca pierde la sonrisa, pero hay cosas que no le gustan.
La marquesa también ha querido comentar el reciente fallecimiento de la reina Isabel II de Inglaterra “Es una pena, es como si perdieras a alguien que conoces” y del inicio del reinado de su hijo con quién ha coincidido al menos en tres ocasiones. A Carlos III le define como un hombre muy elegante que ha tenido la mejor de las educaciones y el ejemplo de su madre que ha sido “una gran, gran Reina”.