La sanidad pública vuelve a estar saturada: “Hacemos medicina de guerra”
Comité General de Valencia denuncia cuatro días de espera para conseguir un ingreso hospitalario
Julio Armas, urgenciólogo, denuncia la falta de camas y personal en las urgencias valencianas
La octava ola de coronavirus se suma al cierre de camas en época estival
Con esperas de hasta cuatro días para poder ingresar en un hospital, la imposibilidad de conseguir una cita en un centro de atención primaria y las urgencias de los hospitales públicos completamente saturadas, el Comité de General de Valencia ha denunciado la situación y Julio Armas, médico de urgencias ha conectado en directo con ‘Ya es mediodía’ para contarnos la realidad de una sanidad que vuelve a estar saturada.
La habitual situación de falta de personal en época estival y la octava ola de coronavirus se han convertido en la combinación perfecta para poner a la sanidad pública, una vez más, al borde del colapso. Ante la denuncia del Comité General de Valencia por los cuatro días que los pacientes tienen que esperar para poder ser ingresados en un hospital, Sonsoles Ónega ha conectado en directo con Julio Armas, médico de urgencias, quien nos ha dibujado una situación muy complicada para poder realizar su trabajo y atender a los pacientes como se merece.
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El experto no tiene la sensación de que el sorprendente aumento de casos de covid y el aumento de ingresos sea el único motivo que mantiene a la sanidad pública valenciana al borde del colapso “Es una realidad que tenemos desde hace varios años, pero ahora se suman varios factores”. Al aumento de casos de covid hay que sumarle el habitual cierre de camas en verano y que no se cubren las vacaciones de los sanitarios. Además, tiene la sensación de que “Y la saturación de los hospitales es derivada de una mala atención primaria” y todos los pacientes que no tienen acceso a una cita con su médico de familia, esperan una operación o una cita con un especialista, acaban en el servicio de urgencias de un hospital.
Julio Armas ha denunciado una situación que no es justa ni para médicos ni para pacientes y que les vuelve a utilizar términos empleados en el peor momento de la pandemia “No podemos atender a los pacientes como queremos, hacemos una medicina de guerra”. Cree que antes de volver a vivir este tipo de situaciones alguien debería preguntarse “¿Por qué se saturan las urgencias? ¿Por qué esperan los pacientes para ser ingresados en un pasillo?”.