La resistencia ucraniana, la presión de los oligarcas y las sanciones europeas amenazan con complicar la guerra a Putin. Además, la falta de gasolina y alimentos para las tropas está provocando que varios tanques rusos se queden parados en mitad de las carreteras de acceso a la capital.
Las sanciones que está imponiendo la Unión Europea a Rusia desde que estallara esta guerra no se lo están poniendo nada fácil al presidente que está viviendo una oposición a su régimen sin precedentes. Grandes empresas multinacionales, empresas telefónicas, empresas energéticas, fabricantes y marcas de ropa han hecho boicot a Putin.
Este Boicot podría hundir la economía rusa. La bolsa sigue cerrada desde le lunes tratando de evitar una caída histórica. El rublo se ha desplomado hasta un 30% y los tipos de interés se han disparado del 9 al 20%. En menos de 48 horas, algunos economistas se han hecho un 30% más pobres y han salido en masa a los cajeros en un intento desesperado por retirar depósitos.