Durante la entrevista a Ana María Aldón en el plató de ‘Ya es verano’ ocurría algo inesperado. Aniceto, hermano de José Ortega Cano, llamaba por teléfono en pleno directo a la presentadora del set de corazón, Verónica Dulanto, para pedirle que el programa se pusiera en contacto con el torero porque Ortega quería intervenir.
Al instante, la redacción de ‘Ya es verano’ llamaba por teléfono a José Ortega Cano y el torero hablaba alto y claro sobre los últimos acontecimientos y sobre la polémica que desde hace meses rodea a su familia:
“Lo primero quiero pedir disculpas por entrar otra vez en la televisión porque para mí tampoco es muy de gusto tener que hablar continuamente, pero tratándose del tema que están ustedes hablando a mí me gustaría poner las cosas en un equilibrio (…) Ni nadie es muy malo ni nadie es muy bueno, si no que todos somos regulares, en un término medio, en ese término medio está que entre la familia tenemos que llevarnos lo mejor posible, tanto la familia de ella como la familia mía, que no haya mal rollo porque la vida es muy corta y todo se acaba y no merece la pena que en una casa como esta estemos cada uno por un lado. (…) Si ella dice que todo está muy bien pues no es cierto porque entre ella y yo no hay diálogo, no sé si es su culpa o la mía, pero yo tengo muchos años y he pasado mucho a lo largo de toda mi vida, me gustaría estar lo más tranquilo posible, me gustaría que desde ahora tomáramos conciencia, tanto ella como yo, de que estamos arrastrando a los niños, tanto a los mayores como a los pequeños, y necesitamos una buena convivencia y comunicación para ser una familia ordenada, no desordenada como está en estos momentos. (…) Me gustaría que diéramos un giro de 180 grados todos y que si mi hija Gloria tiene un problema con ella yo trataré de solucionarlo, y lo mismo digo de los demás, que pongamos todos de nuestra parte porque la cosa se está saliendo de madre y no debemos seguir así, se trata simplemente de que haya buena armonía entre nosotros, esto es lo que quería decir y si ella quiere decir algo más que lo haga”.
Tras estas palabras, Ana María cambiaba por completo su actitud ante la llamada y lanzaba el que sin duda era el mayor dardo de la conversación:
“El matrimonio es cosa de dos en algunos casos, pero en otros casos hay demasiada gente”.
Tras un silencio incómodo, el torero finalmente contestaba a su mujer restándole importancia una vez más a sus ideas y explicando que a él lo que le gusta es tener una casa con gente, en la que la familia y los amigos tengan un lugar:
“Cada uno tiene sus razones, ella tiene ese pensar y ese sentir pero yo te digo una cosa, a mí me gusta ver mi casa con gente, me gusta estar con mi familia y con amigos, y os digo que a ella también le gusta, pero en este momento ella está negativa y lo piensa así, yo lo siento pero prefiero estar acompañado que solo”.
Era la propia Ana María la que reconocía el pasado fin de semana en este mismo plató que ella y Ortega Cano ya dormían en camas separadas y que la comunicación entre ellos era prácticamente nula, que solamente hablaban de temas relacionados con el hijo que tienen en común. Hoy Ortega Cano daba su versión:
“Yo me considero una persona noble y entonces me afecta cualquier cosa de manera muy fuerte, por eso lo que más siento es el hecho de estar yo en casa y estar como si no existiera en el sentido de los dos, no estoy hablando de mí solo, de que tengamos ese silencio y no tengamos comunicación ni de una manera ni de otra”.
Ana María seguía algo tensa y echaba en cara a su marido que sus amigas periodistas supieran de la situación de la pareja, algo que el torero intentaba evitar respondiendo con evasivas:
“Ya se encargan Paloma Barrientos y Beatriz Cortázar de decir que no tenemos comunicación, están muy bien informadas las personas de tu círculo” (…) “Es que ellas saben mucho de la vida y de los matrimonios y están muy informadas, además de que son muy buenas personas”.
Verónica Dulanto aprovechaba la llamada de Ortega Cano a ‘Ya es verano’ para hacerle la pregunta que muchos se hacen: ¿sigue enamorado de Ana María o su deseo es separarse de ella?
“Yo sigo enamorado de Ana María porque eso lo llevo dentro, lo llevo muy dentro de mí, yo a ella la quiero mucho, en algún momento a lo mejor he podido tener algún pequeño desliz con alguna palabra y alguna cosa, pero lo que nos faltaba era comunicación y diálogo, espero que después del día de hoy ya no sea así”.
Ana María sin embargo no tiene las cosas tan claras y se ve incapaz de olvidar lo que ha pasado en los últimos tiempos. Así lo explicaba con lágrimas en los ojos:
“Han pasado muchas cosas y son cosas que no se pueden olvidar, pero a pesar de todo eso somos padres de un niño que nos tiene que ver lo mejor posible, pero que seamos dos tomando decisiones pero no dieciocho (…) Me alegro de que hayas entrado con este tono porque no me gusta verte alterado o enfadado”.