Las historias de 'Volverte a ver' que rompieron al mismísimo Sobera, ¿cuál es la que más te emocionó? Participa en la encuesta
Historias de hermanos separados tras nacer, hijos que buscan a sus padres biológicos, agradecimientos a personajes famosos...
Cada semana, 'Volverte a ver' nos presenta las historias más emocionantes. Famosos y anónimos traen hasta el espacio presentado por Carlos Sobera relatos que nos dejan con el corazón encogido y que cortan la voz al presentador.
Hemos recopilado los momentos más lacrimógenos del programa para que vuelvas a emocionarte con ellos y para que nos digas con cuál te quedas. ¡Prepara un pañuelo!
Miren y su horrible orfanato
La infancia de Miren fue todo un sufrimiento. Sus primeros años de vida los pasó en un orfanato aterrador de San Sebastián durante los años sesenta. Allí vivió momentos dramáticos: “No nos trataban bien, si me hacía pis me metían la cabeza en agua fría y después me metían en el armario mojada”.
Jesús Manuel descubre la verdad
Jesús Manuel quería cumplir un sueño: conocer a los padres que le dieron la vida. No tenía recuerdos de su familia biológica pero no podía borrar de su memoria la primera vez que vio a los que fueron sus padres adoptivos, cuando tenía cuatro años.
La horrible historia de estos hermanos
Juan Manuel le hizo a su madre una promesa antes de morir: encontraría a su hermana biológica. De ella solo sabe que se llama Andrea y que su madre tuvo que darla en adopción “por circunstancias de la vida”.
Abandonados en dramáticas circunstancias
Elisa y Cristian son dos hermanos que se pusieron en contacto con el programa para intentar dar con sus hermanos biológicos. Son siete en total y su historia es muy dura. Sus padres les abandonaron en una habitación a oscuras, sin agua y sin comida y desde entonces se separaron, pues fueron adoptados por diferentes familias.
Lydia Bosch, derrumbada
Carol falleció hace tres años de un cáncer de mama y su madre Cinta y hermano Iván quisieron hacerle llegar a Lydia Bosch lo mucho que su hermana e hija admiraba a la actriz. Durante su enfermedad, Carol sintió el apoyo constante de Lydia y su familia le quiso agradecer todo lo que había hecho por ella.
La sorpresa a Sobera
Por primera vez Carlos Sobera cedió su puesto de presentador para pasar a ser protagonista. Sin esperarlo y con unos nervios que no le dejaban quieto, Sobera recibía un objeto de la mano de la mensajera Sofía Cristo. Sin saberlo, el Padre Ramón (su profesor y mentor teatral) quería hacerle una visita sorpresa para recordar su juventud y concederle un obsequio que emocionó a Sobera.